VALÈNCIA (EP). El consejero delegado de CaixaBank, Gonzalo Gortázar, ha valorado muy positivamente el crecimiento del 16,7% del PIB en el tercer trimestre y está convencido de que se cerrará el año con una caída inferior al 12,5% como auguraban los pronósticos.
En la rueda de prensa de presentación de resultados del banco en el tercer trimestre, ha destacado que durante el tercer trimestre la situación económica evolucionó mejor de lo que se esperaba y ha augurado que, aunque el PIB volviera a caer en el cuarto trimestre por las restricciones, la caída global del año sería menor al 12,5%.
"Al tiempo que el tercer trimestre ha sido mejor, el cuarto será algo más débil de lo que pensábamos", y ha añadido que, antes de que se anunciaran las restricciones, la previsión de crecimiento para el último trimestre del año era del 1,4% y se hubiese cerrado 2020 con una caída del 10,6%.
Los servicios de estudios del banco "reevaluarán" la previsión de cierre de año con los datos de las nuevas restricciones y su impacto en la actividad económica.
Sobre la recuperación, ha asegurado que "no es tan relevante" ver cuánto cae el PIB en 2020 y cuánto sube en 2021 como la caída acumulada entre los dos ejercicios, que ha pronosticado en torno al 5%, y considera que será importante ver cómo está la pandemia cuando empiece el nuevo ejercicio.
Gonzalo Gortázar también ha explicado que los datos de pago con tarjetas y de retiro de efectivo anticipan una reducción de la actividad económica.
Por último, ha destacado que en la última semana el banco está registrando caídas de estas dos actividades de alrededor del 10%, aunque ha dicho que hace falta más tiempo para cuantificar el impacto exacto que la segunda ola del virus tendrá en la economía.
El consejero delegado de CaixaBank, Gonzalo Gortázar, ha defendido este viernes que se deben prorrogar los créditos ICO, así como los periodos de carencia, ya que se trata de una medida muy útil: "Ha funcionado muy bien. Ha llegado la liquidez en un momento en que era muy necesaria".
Gortázar ha advertido de que la llegada de nuevas restricciones de actividad que afectan en particular a una serie de sectores y empresas hará que a partir del segundo trimestre no haya la normalidad completa: "El sentido común hace pensar que una buena herramienta tenemos que alargarla en el tiempo".
Ha señalado que el sector empresarial no solamente necesita liquidez, sino que también puede necesitar ayudas en forma de capital u otros instrumentos que no generen un mayor apalancamiento.
"No solo es mantener liquidez, sino que hay que hacer más cosas en determinados ámbitos y evidentemente con ayudas directas", ha sostenido, aunque ha advertido de la necesidad de emplear bien el capital.
Desde el inicio de la comercialización de las líneas ICO Covid-19, CaixaBank ha concedido 162.175 préstamos por 11.944 millones de euros, cuya demanda se ha moderado en el trimestre.
Ha recordado que ha habido una época larga de tipos de interés muy bajos en algunas monedas, como el euro, y que no se sabe bien qué consecuencias secundarias tendrá una situación como esta.
"El mercado espera que estos tipos negativos ahora se prolonguen durante muchísimo tiempo y, por tanto, nos genera una inquietud aún mayor. A largo plazo con tipos negativos se distorsiona el análisis de inversiones y es posible que el capital no se reparta correctamente", ha añadido.
Sin embargo, considera que en el corto plazo --12 meses-- es mucho mayor el riesgo más tradicional de este choque "tan fuerte" de oferta y demanda y la necesidad de políticas expansivas, y ha sostenido que en el futuro habrá qué ver qué se tiene que hacer para compensar posibles impactos no deseados de esta política.
Sobre una eventual burbuja, Gortázar ha sostenido que tiene dudas de si se podrá detectar, pero está convencido de que esta situación de tipos de interés muy bajos y en muchos sitios negativos puede generar distorsiones: "Tenemos que estar muy atentos".