VALÈNCIA. (EP) La vicepresidenta primera del Gobierno y ministra de Asuntos Económicos y Transformación Digital, Nadia Calviño, ha detallado que el Gobierno convocará ayudas por 500 millones de euros para digitalizar pymes antes de que termine el año.
En su comparecencia este jueves ante la Comisión Mixta en el Congreso de los Diputados para la Unión Europea para informar sobre los avances del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia de la economía española, Calviño ha detallado en más profundidad el primer desembolso del 'digital toolkit' para pymes.
Esta primera convocatoria estará destinada a las empresas de entre 10 y 49 trabajadores, tal y como adelantó la secretaria de Estado de Digitalización e Inteligencia Artificial, Carme Artigas, el pasado martes.
En el plan enviado a Europa, el Gobierno tenía previsto destinar casi 600 millones de euros a la digitalización de las pequeñas y medianas empresas antes de terminar el año.
Asimismo, la vicepresidenta primera ha señalado que a "principios de 2022" se pondrá en marcha otro programa de ayudas en la misma línea.
Esta convocatoria se une a la línea para emprendedoras digitales de Enisa, las subvenciones para implantar inteligencia artificial en la cadena de valor o el programa UNICO para extender la banda ancha.
El digital toolkit permitirá a las pequeñas y medianas empresas invertir en servicios digitales ya disponibles en el mercado y cuenta, en su conjunto, con un presupuesto de 3.000 millones de euros.
La vicepresidenta ha afirmado este jueves que si se mantienen las tendencias actuales, el primer trimestre de 2022 será el primero con un nivel de actividad superior a su equivalente de 2019 y ha anticipado que en el caso del empleo, la recuperación prevista es incluso anterior.
La vicepresidenta ha reafirmado que la recuperación está en marcha y es muy intensa, más allá de la "volatilidad" de los indicadores económicos generada por el entorno anómalo provocado por la pandemia. Justo hoy el Instituto Nacional de Estadística (INE) ha rebajado el crecimiento del PIB del segundo trimestre al 1,1%, frente al 2,8% estimado inicialmente.
Pese a esto, la titular económica del Gobierno ha asegurado que "todo apunta a que 2021 está yendo de menos a más" y ha remarcado que el Ejecutivo está siguiendo una línea marcada por la "prudencia".
En este sentido, ha puesto en valor que todos los datos, sobre todo los referidos a la evolución del mercado laboral, apuntan a un fuerte crecimiento que si se mantiene permitirá que España recupere el nivel de actividad diaria y de empleo prepandemia antes de final de año.
Según ha explicado la ministra, esta recuperación se basa en la positiva evolución sanitaria, la recuperación del turismo, el dinamismo del consumo privado, el impulso de la inversión y despliegue del Plan de Recuperación.
Dos de los elementos clave para advertir la deriva de economía española son principalmente la evolución de consumo privado y de la inversión. Sobre el primer factor, Calviño ha señalado que los datos de gasto con tarjeta en 2021 ya son superiores al registrado en 2019, algo en lo que también puede tener que ver el cambio de hábitos de los consumidores, que prefieren cada vez más este método de pago.
La responsable de Economía ha explicado que en esto tiene que ver la reducción de la incertidumbre y la reactivación del gasto de los hogares, tras acumular por la crisis un ahorro embalsado de 50.000 millones de euros, según los cálculos del Ministerio.
De su lado, Calviño ha señalado que el factor diferencial en cuanto a la recuperación es el dinamismo de la inversión, para la que se prevé un rebote en 2021, con tasas de crecimiento de dos dígitos y para la que se estima que alcance niveles precrisis en 2022.
Aunque en el caso de la construcción todavía la inversión está por debajo del crecimiento previsto, la vicepresidenta ha destacado que todo apunta a una recuperación intensa de la inversión de bienes de equipo.
Así, la ministra ha concluido que la recuperación está en marcha y algunas de las incertidumbres de estos 20 meses se están disipando, aunque ha admitido que aún queda mucho por hacer para encauzar la recuperación a un crecimiento sostenido y sostenible.
De cara a un futuro inmediato, la vicepresidenta se ha propuesto centrar los esfuerzos en la ejecución del Plan de Recuperación y para ello espera contar con apoyo de las Cortes para impulsar la economía y que la recuperación sea sostenida, sostenible y justa.