VALENCIA. Hablar de Cartera Danoa es hacerlo de una de las históricas sicavs del panorama financiero valenciano, pese a que está domiciliada en Madrid pero que siempre ha estado directamente vinculada a esta ciudad. Fue registrada oficialmente por la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) el 23 de enero de 2003, apenas seis meses después de su constitución.
Pero, ¿quién está detrás? Vicente Saus, presidente de Eresa, acrónimo de Exploraciones Radiológicas Especiales Sociedad Anónima, imputado por presunto fraude en subvenciones a la empresa valenciana de resonancias magnéticas. Saus ejerció de presidente de esta sociedad de inversión de capital variable entre octubre de 2007 y septiembre de 2012.
Actualmente al frente de la misma figura Manuel Balanzat, antiguo responsable de grandes patrimonios en Bankia y ahora integrado en el equipo de Mirabaud en Valencia bajo la dirección de Luis Fernando Capilla, uno de los históricos de la banca privada de la extinta Bancaja. Entre los consejeros de dicha sicav aparecen Javier Lucas, también de Mirabaud y con pasado en Bancaja, o Álvaro Nieto, otrora director regional de la caja valenciana en Madrid.
Precisamente la filial española de la histórica firma de inversión suiza lleva la gestión de esta sicav que cerró el pasado año con sus mejores números desde antes de la crisis. Lo hizo concretamente con 2,74 millones de euros, el mayor desde los 3,43 millones de finales de 2008. Así lo constató ayer por la tarde este diario de la base de datos pública de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).
Sin embargo, la rentabilidad acumulada a lo largo del pasado ejercicio apenas fue del 1,57% -hay que tener en cuenta que 2015 fue un año muy complicado en los mercados financieros-, muy por debajo del 2,83% obtenido en 2014 y del 4,16% de 2013.
Asimismo, a 31 diciembre pasado eran 115 accionistas presentes en este vehículo de inversión depositado en Bankinter, pero con la particularidad de que uno de ellos -¿alguien duda de que no es el propio Faus?- controla el 99,98%, mientras el resto se reparte entre los otros 114 accionistas.
Echando un vistazo a su porfolio lo primero que llama la atención es que está muy diversificada, algo fundamental a la hora de invertir para no 'poner todos los huevos en la misma cesta'. De hecho se podían observar tanto posiciones defensivas -renta fija- como más arriesgadas -renta variable- pasando por participaciones en instituciones de inversión colectiva (IIC), principalmente fondos, de gestoras de talla internacional como BlackRock, BNY Mellon, Henderson o Invesco, entre otras.
En lo que a posiciones de deuda se refiere se podían ver participaciones en empresas como Arcelor, Enbw, Fiat, Intesa San Paolo, KPN, Peugeot, Unicredito... y Telefónica en el plano doméstico; mientras que en acciones la representación española era algo mayor con Banco Santander, Bankinter, BBVA, Ferrovial, Gamesa, Merlin Properties, Repsol, Telefónica y Zeltia. La alemana Bayer era la única presencia foránea en títulos de bolsa a 31 de diciembre de 2015.
