Casar Pinazo regresa al Museu de Belles Arts… para ser cesado

VALÈNCIA. Las incógnitas en torno a la presente y futura dirección del Museu de Belles Arts de València sobrevuelan el museo desde hace meses. La baja por grave enfermedad de José Ignacio Casar Pinazo coincidía con la intención de impulsar la convocatoria de un concurso para cubrir su plaza. Sin embargo, la salida temporal del director provocó un parón en este proceso y tuvo como consecuencia la entrada al despacho de la arquitecta Margarita Vila, que hacía su aparición en escena como sustituta de Pinazo. Este movimiento dejaba el concurso -que no había llegado a publicarse- en pausa, tal y como afirmó en su momento la directora general de Cultura y Patrimonio, Carmen Amoraga, quien advirtió que no se reanudaría el plan hasta la reincorporación del director a la pinacoteca. Y llegó el día. 

Ha sido este mismo viernes cuando Casar Pinazo ha vuelto al museo, tras haberle sido dada el alta médica, un regreso que será muy breve, pues ya se le ha comunicado que será cesado próximamente, un cese que se hará efectivo en los próximos días. La noticia no es una sorpresa ni para unos ni para otros. Bien es conocida la urgencia de la conselleria de Cultura por poner en marcha el concurso con el objetivo de poner capitán o capitana en un museo que ha tenido que batallar mucho en los últimos años. El cese, además, tiene mucho que ver con el propio proceso de elección de nuevo director. Este proceso está dirigido a funcionarios, una convocatoria a la que el propio Casar Pinazo puede optar… en caso de no ocupar la misma plaza. 

Solo había dos opciones: o dimitía o era cesado. La elegida ha sido la segunda. Con todo, según ha podido saber este diario, el cese se hará efectivo la próxima semana y será Margarita Vila quien continúe al frente de la institución en este proceso, aunque pasará de ser sustituta a directora por adscripción provisional. Precisamente, el propio Casar Pinazo asumió la dirección del museo de forma provisional, en este caso tras la salida de Paz Olmos. Preguntado en septiembre de 2018, durante una entrevista con Culturplaza, por la posibilidad de presentarse a dicho proceso de selección, explicó: "Al principio, cuando me hacían estas preguntas, inmediatamente decía que no. Con el paso del tiempo lo dejo abierto. Ya veremos".

Por el momento es un misterio si, tras el proceso de selección, resultará seleccionado Pinazo, Vila o, de hecho, siquiera si se presentarán. Hay que tener en cuenta, eso sí, que este concurso, por la propia arquitectura administrativa del museo, está solo dirigido a funcionarios, al contrario que otros procesos como el de director del Insititut Valencià de Cultura o gerente del Consorci de Museus de la Comunitat Valenciana, abierto a profesionales ajenos a la administración pública. 

Los plazos que maneja la administración para la convocatoria de la plaza, especialmente teniendo en cuenta que se está formando el nuevo gobierno autonómico, son inciertos, aunque en el último año se ha querido agilizar esta cuestión, tratándose además de una de las promesas en materia cultural de la anterior legislatura. De hecho, ya cuando se comunicó que Margarita Vila pasaba a asumir las tareas de dirección, la Generalitat aprovechó para anunciar que la vuelta de Casar Pinazo iría vinculada a la convocatoria del concurso. “Margarita Vila ocupará el cargo de manera transitoria, hasta que se incorpore José Ignacio Casar Pinazo. Más adelante se convocará a concurso la plaza de director del Museo de Bellas Artes de Valencia”, rezaba el comunicado emitido por conselleria el pasado mes de diciembre.