VALÈNCIA. El Ayuntamiento de València celebrará el próximo lunes el Debate sobre el Estado de la Ciudad. Un tradicional pleno extraordinario de inicio de curso donde el alcalde -en este caso, María José Catalá- acostumbra a exponer de manera detallada los logros del gobierno que preside y los retos del consistorio para el curso político que empieza. Pero esta vez, al debate se le añadirá un componente extra: el debate que había solicitado Compromís a cuenta de la última sentencia sobre la caja 'B' del PP de València ciudad durante el mandato de Rita Barberá, y que condenaba a cuatro años de prisión al exvicealcalde, Alfonso Grau.
Además del ya instaurado Debate del Estado de la Ciudad, el gobierno municipal estaba obligado a convocar el debate solicitado por Compromís sobre la financiación irregular de los populares, dado que la coalición valencianista ostenta los concejales mínimos requeridos para forzar la celebración de un pleno extraordinario. En ese sentido, el ejecutivo que lidera María José Catalá ha decidido encajar ambas convocatorias el mismo día, según ha trasladado a la Junta de Portavoces de este mismo miércoles.
La estrategia de la primera edil podría considerarse un arma de doble filo. Por una parte, evitará la celebración de un pleno extraordinario ad hoc para hablar exclusivamente del fallo de la Audiencia Provincial, que tendría un impacto mediático diferenciado en cualquier otra jornada. Por otro, ciertamente, suplementar el Debate del Estado de la Ciudad con el debate sobre la corrupción constatada en la sentencia en el PP valenciano puede ensombrecer la jornada.
Cabe recordar que el Debate del Estado de la Ciudad suele emplearse por el primer edil, sin límite de tiempo, para destacar los logros conseguidos durante el mandato. De modo que es una oportunidad para que Catalá 'venda' el cambio de rumbo que, tal como insiste el equipo de gobierno, ha implementado en las políticas municipales desde las pasadas elecciones de mayo de 2023. Así, la introducción de los puntos exigidos por Compromís para tratar la sentencia sobre el pasado del PP, a decisión de los populares, supondrá también un contrapunto en la crónica final de la cita.
La alcaldesa ha asegurado que, el de la ciudad, se trata de "un debate importante en el que el gobierno local dará cuenta de los logros alcanzados y planteará retos pendientes”. “Se enmarca en una política de transparencia y democracia, ya que es un foro que fomenta la participación de la ciudadanía para que exprese sus opiniones y preocupaciones”, ha añadido.
Al respecto, la portavoz de Compromís per València Papi Robles ha acusado a Catalá de convocar el Debate del estado de la ciudad "con nocturnidad". Así se lo ha expresado a la alcaldesa del PP en la Junta de Portavoces: "Catalá ha convocado el debate con sólo una semana de margen porque quiere pasar de puntillas por él y teme explicar a la ciudadanía y a la oposición sus políticas, qué ha hecho y qué quiere hacer". Por eso, ha subrayado, "se esconde y convoca el debate de hoy para mañana para que no haya capacidad de reacción", lo cual a su juicio "demuestra un desinterés absoluto por el futuro de la ciudad y cómo lo construimos".
Se trata, ha dicho, de una actitud que "también ha demostrado convocando por la puerta de atrás al Pleno extraordinario que desde Compromís pedimos para tratar la condena por corrupción en el PP de València". "En julio conocimos una sentencia muy firme sobre esta corrupción, en concreto en lo referente a la etapa de gobierno de Rita Barberá, y todavía la actual alcaldesa del PP no ha dicho absolutamente nada", ha afeado la portavoz de Compromís, que ha pedido "que le retire los honores y homenajes a Barberá después de quedar demostrado que toda su gestión estaba vinculada a la corrupción, que el PP ganaba elecciones dopado con empresas que le facilitaban tener una caja B y que su mano derecha en el gobierno municipal actuó como una mafia".
"Desde Compromís le pedimos que garantice que esto no volverá a ocurrir, porque encontramos similitudes con ese PP condenado y el actual", ha aseverado, para exigir también que "Catalá pida disculpas por lo que hizo su partido, que recupere el dinero que robaron y que no vuelva a contratar con aquellas empresas que contribuían a la financiación irregular del PP". En esa línea, ha insistido que es "muy sospechoso que determinadas empresas que nombra la sentencia vuelven a contratar con el PP en el Ayuntamiento de València".
"Si a esto le sumamos la falta de transparencia y la opacidad que se está instaurando en este gobierno municipal, significa que vuelven las prácticas del PP que han terminado con una condena por corrupción. Unas prácticas que no queremos que vuelvan a las instituciones: que no dejen otra vez endeudado al Ayuntamiento, ni se robe dinero público ni se destruya la reputación de València", ha concluido la portavoz de Compromís.
Por su parte, el portavoz del PSPV de València ciudad, Borja Sanjuán, ha afirmado que “este debate al final es un momento que además exigió la oposición en su día para que las entidades vecinas puedan participar, para que la gente pueda saber cuáles son los diferentes modelos de ciudad y para que entre todos intentemos hablar de cuál es la situación de Valencia”. Sanjuán ha criticado que “se ha utilizado por parte de la alcaldesa para tratar de tapar un pleno extraordinario sobre la corrupción del Partido Popular”.
En el próximo debate del estado de la ciudad, el portavoz socialista ha declarado que los socialistas van "a reivindicar que cambie el protagonista que para el ayuntamiento en estos momentos tiene Valencia”. Según Sanjuán, “en Valencia con un gobierno progresista el protagonista eran los vecinos y las vecinas y un año después los protagonistas son los especuladores inmobiliarios, aquellas personas que quieren ganar mucho dinero vendiendo la ciudad a trozos o que les parece una barbaridad que en primera línea de playa haya viviendas de protección oficial y no hoteles de cinco estrellas”.