CASTELLÓ. El gigante frutícola Citri&Co, surgido de la compañía castellonense Martinavarro, no cesa de crecer. El grupo con sede en Sollana y que tiene como principal accionista al fondo inversor barcelonés Miura Partners ha anunciado este miércoles la compra del negocio de fruta fresca de uno de los líderes del sector en Argentina, San Miguel.
La adquisición, para la que todavía falta el aval de las autoridades pero que San Miguel ya ha comunicado a la Comisión Nacional de Valores argentina, se produce después de que el conglomerado español, centrado eminentemente en los cítricos, haya alcanzado un acuerdo con el fondo inversor canadiense PSP para que este se haga con gran parte de sus campos en la Península Ibérica, según anunció recientemente Expansión.
Desde la compañía no han querido valorar la noticia, que separan de la compra en Argentina, pero lo cierto es que esta se ha producido solo unas semanas después de conocerse el acuerdo con PSP, por el que Expansión señala que Citri&Co puede ingresar más de 150 millones de euros y cuyos campos arrendará a largo plazo al fondo inversor, de forma que seguirá gestionándolos.
Ahora no ha trascendido el monto de la operación, que San Miguel prevé comunicar cuando se materialice definitivamente, según ha informado el diario argentino La Nación. Lo que sí se conoce es la cantidad de fruta que suma a las 700.000 toneladas que ya comercializaba. Con la compra del negocio en fresco de la firma argentina, Citri&Co suma unas 190.000 toneladas, en su mayoría de cítricos, el foco en el que ya está centrado.
No en vano, la operación comprende la compra del 100% de las acciones de San Miguel Fruits Perú, con una producción de 50.000 toneladas, fundamentalmente de mandarinas, en sus 1.300 hectáreas de terreno; y de San Miguel Fruits South Africa, con "más de 80.000 toneladas de cítricos comercializados al año, más de 1.000 hectáreas en propiedad y dos plantas de empaquetado", apunta la compañía.
Además, a estos volúmenes hay que sumar las 60.000 toneladas que San Miguel produce en sus campos de Argentina y Uruguay, que cultivará la firma local pero que comercializará Citri&Co.
Con el acuerdo, la compañía que surgió de la adquisición de Río Tinto por parte de Martinavarro a mediados de 2017 y que sumó un año después a la alicantina Perales y Ferrer, da un nuevo salto en el panorama internacional. No en vano, y después de que en medio de esas operaciones sumase a Miura como socio para convertirse posteriormente en el principal, el grupo siguió incorporando empresas, como Frutas Esther; para posteriormente comenzar a dar los primeros pasos en el extranjero.
El primero fue la adquisición del 75% de la empresa citrícola marroquí Sunpack; para después dar el salto al otro lado del charco con la compra de la brasileña Agrícola Famosa, especializada en melón y sandía. Ya en este año ha absorbido a la comercializadora francesa Arco Fruits, especializada en la venta y distribución de cítricos y fruta de hueso... y ahora da un salto especialmente relevante.
No en vano, la compra del negocio en fresco de San Miguel (que tras 65 años de vida se centrará ahora en el procesado del limón) "le permitirá crecer en mercados como Estados Unidos, Oriente Medio y Asia", remarcan desde Citri&Co en su comunicado. Pero no solo ello. Y es que con el salto al hemisferio sur el grupo español se garantiza el suministro de naranjas durante todo el año, con lo que tendrá más fácil la importación hasta Europa de la fruta de esta parte del mundo, algo que ya venía realizando. Además de todo ello, la operación le permite incorporar a su oferta otras "frutas de gran valor añadido", con lo que su carpeta de productos es cada vez más amplia.
