ELCHE. Los estudios de Ciudad de la Luz comienzan en 2024 su camino hacia emisiones Cero Neto y para ello han elaborado un Manual Corporativo de Sostenibilidad, en línea con los objetivos del Pacto Verde Europeo y los Objetivos de Sostenibilidad (ODS) de Naciones Unidas, para garantizar que todas las filmaciones que alberguen los estudios cumplan las medidas de respeto medioambiental en todas las fases de la producción.
Este green book, realizado por la empresa Creast para Ciudad de la Luz, proporciona directrices para que las producciones audiovisuales sean más sostenibles. Además, propone medidas para predecir y medir la huella de carbono que genera cualquier producción de las que reciben los estudios alicantinos, así como para articular un plan de reducción de impactos y compensar la emisión de gases de efecto invernadero.
"En un sector como el audiovisual, donde las producciones llegan a mover un volumen enorme de recursos, disponer de una guía verde como esta es esencial para proporcionar a los clientes de Ciudad de la Luz las herramientas que les permitan reducir los impactos negativos en términos de sostenibilidad", explicaba en este sentido el director general de los estudios alicantinos, Fermín Crespo.
Así, este green book pone en valor la importancia de contar con una base creciente de proveedores y profesionales locales, como hace Ciudad de la Luz, a la hora de reducir la movilidad de los equipos para completar las producciones.
También es primordial su ubicación estratégica, a escasos km de un aeropuerto internacional y de una estación de tren de alta velocidad, o la existencia de una base de más de 70.000 plazas hoteleras disponibles, que garantizan la movilidad diaria por debajo de los 10 kilómetros y cumplen sobradamente con la recomendación del Sello Verde de la Academia de Cine en materia de movilidad.
El tanque de agua exterior, uno de los más grandes del mundo y uno de los elementos distintivos de Ciudad de la Luz, también responde a los parámetros de sostenibilidad con su sistema de bombeo de agua procedente del mar -que se encuentra a escasos metros de las instalaciones-, y está dotado con la opción de llenado y vaciado parcial, lo que ayuda a reducir el consumo energético y optimiza su eficiencia medioambiental.
El Manual Corporativo de Sostenibilidad de Ciudad de la Luz recoge una serie de recomendaciones para las productoras que vienen a trabajar a sus instalaciones. Así, aconseja la contratación de plazas en los hoteles más cercanos y que implementen medidas de sostenibilidad, para reducir el impacto medioambiental de la estancia y del transporte diario al lugar de trabajo.
De igual modo, en el campo de la movilidad los estudios apuestan por dar prioridad al uso del tren para los desplazamientos largos, así como la contratación de coches eléctricos o híbridos para reducir las emisiones de los vehículos utilizados durante la producción. Para ello, los estudios cuentan con 18 puntos de carga en sus instalaciones.
En este ámbito, en Ciudad de la Luz tiene su base una compañía de transporte pesado con flota de camiones estacionada en los propios estudios, cuya contratación está a disposición de los clientes, con el objetivo de reducir los desplazamientos de larga distancia de transporte pesado.
En cuanto al consumo de energía, el complejo audiovisual contrata energía certificada 100% renovable que ofrece a sus clientes y, además dispone de grupos electrógenos de apoyo de gas natural, en vez de combustible fósil, reduciendo así la huella de carbono.
Uno de los proyectos más importantes es la instalación de placas fotovoltaicas para generar y reducir la carga de consumo. Además, tiene contadores de luz y de agua individuales por cada espacio, lo que permite controlar los consumos exactos de cada área.
Así mismo, Ciudad de la Luz recomienda a las productoras un paquete con diversas medidas de eficiencia energética para el uso de electrodomésticos, la compra de suministros y otros elementos para su aplicación durante el desarrollo de las distintas fases de producción.
Otros aspectos a tener en cuenta están relacionados con el diseño y servicios del complejo, como es el hecho de que las instalaciones de Ciudad de la Luz tengan enormes ventanales que ofrecen luz natural en el interior de las estancias, así como amplios talleres para los equipos de escenografía, lavanderías para los equipos de vestuario y cocinas con el equipamiento necesario para elaborar la comida del equipo de rodaje, sin necesidad de salir de las instalaciones. Con todo ello se consigue reducir emisiones, al evitar desplazamientos y consumir energías renovables en los procesos.
Por otra parte, dentro de su estrategia de reducción de residuos, los estudios alicantinos ponen a disposición de todas las producciones una selección de programas de donación para dar una segunda vida a los materiales usados, así como infraestructuras para el reciclado selectivo de residuos.
En la reducción de la huella de carbono cobra especial importancia también el uso de los materiales en las distintas instalaciones del complejo audiovisual que deben ser sostenibles y biodegradables. Por ejemplo, en el caso de Ciudad de la Luz, la zona de talleres está dotada de maquinaria pesada para trabajar la escenografía de las producciones, evitando así tener que contar con transporte pesado para movilizar dichas máquinas. Además, existen dispositivos de recogida de serrín para la correcta gestión de los residuos.
De igual modo, este decálogo de buenas prácticas incluye otros aspectos, como la donación de los materiales que no se vayan a utilizar más a centros sociales locales y políticas plastic-free en el consumo de agua y paper-less. Los edificios de apoyo a producción disponen de lavanderías para lavar de manera sostenible las prendas de vestir en los estudios, evitando así desplazamientos innecesarios de vestuario. Así mismo, los platós tienen suelo fenólico nivelado, que reduce el uso de materiales para la construcción.
En cuanto a la alimentación, Ciudad de la Luz tiene cocinas equipadas con todo lo necesario para cocinar en los propios estudios evitando desplazamientos. En este sentido, y dado que Alicante cuenta con una gastronomía worldclass, este decálogo de medidas propone el consumo de producto local y de temporada o en su defecto, la contratación de compañías de catering locales que, además, implementen medidas de sostenibilidad.
Por otro lado, Ciudad de la Luz incluye dentro del alquiler de las instalaciones la gestión de los residuos domésticos o asimilados (nomenclatura Ley 7/2022, de 8 de abril), lo que implica la instalación de contenedores y recogida selectiva de basuras (envases, papel, vidrio y restos). En este punto, cabe recordar que la normativa vigente exige la separación de todos los desechos por categorías para su posterior reciclaje y tratamiento. En el caso de los residuos de origen industrial y/o tóxicos -tanto inertes como peligrosos-, su gestión es responsabilidad de las productoras, de acuerdo con la legislación vigente y el llamado código NIMA.
En línea con este Manual Corporativo de Sostenibilidad, Ciudad de la Luz ha previsto ofrecer a las producciones que trabajen en los estudios todo un sistema de predicción, oportunidades de mejora, cálculo final y programas de compensación de emisiones inevitables para que puedan ejecutar sus políticas de control de la huella de carbono.