BARCELONA (EP). Colonial registró un beneficio neto atribuido de 11 millones de euros en el primer trimestre, el doble (+131%) respecto al año anterior, impulsado por el incremento de su negocio de alquiler de inmuebles y la reducción de sus costes financieros.
La inmobiliaria participada por el grupo Villar Mir y Qatar ingresó 66 millones de euros por el alquiler de la cartera de edificios de oficinas que tiene en Madrid, Barcelona y París, un 20% más que un año antes.
El negocio en la capital gala, que desarrolla a través de su filial Société Foncière Lyonnais (SFL), aporta las dos terceras partes (el 74%) de los ingresos.
Este aumento de las rentas propulsó un 21% el beneficio bruto de explotación (Ebitda) de la compañía, hasta los 50 millones de euros.
Al resultado de Colonial también contribuyó la reducción de los costes financieros, fruto de la refinanciación de su deuda, con la cancelación de un antiguo préstamo sindicado y la emisión de bonos colocada el pasado año.
En el plano operativo, la compañía firmó contratos de alquiler que suman 45.000 metros cuadrados de superficie de oficinas, lo que arroja un incremento del 40% respecto a un año antes.
De esta forma, Colonial ya ha ejecutado "más de la mitad" del objetivo de contratos de arrendamiento fijado para todo el año. Además, ha elevado hasta el 96% el porcentaje de ocupación de su cartera de edificios.
Respecto al capítulo financiero, al cierre de marzo Colonial presentaba un endeudamiento neto de 3.008 millones de euros, importe equivalente al 41,6% del valor de sus activos.
Por otro lado, Colonial analiza actualmente "en exclusiva" la compra de distintos edificios de oficinas que suman un volumen de inversión de unos 400 millones de euros, según apuntó la inmobiliaria.
Las inversiones de la compañía encajan en su estrategia centrada en edificios de oficinas ubicados en las zonas 'prime' de sus mercados (Madrid, Barcelona y París).
Las nuevas compras se enmarcan en la política de crecimiento que actualmente aborda la compañía que preside Juan José Brugera. En caso de que todas ellas se materializaran, Colonial sobrepasaría su objetivo de ejecutar una inversión media de 300 millones en nuevos activos.
En paralelo a estas eventuales adquisiciones, la inmobiliaria invierte en desarrollo y rehabilitación de edificios. En concreto, reconstruye dos inmuebles en el centro de Madrid y rehabilita distintas rehabilitaciones en activos de Barcelona y París.
"El portfolio 'prime' de Colonial, junto con un enfoque industrial de gestión inmobiliaria, está permitiendo obtener una gran respuesta del mercado de rentas y configura una base sólida para ofrecer un crecimiento sostenible alcanzando ratios de retorno por encima de la media de mercado", destacó en un comunicado el presidente de la compañía.
En la actualidad, la cartera de patrimonio de Colonial está formada por 56 edificios de oficinas en la principales áreas de Madrid, Barcelona y París, que suman una superficie alquilable de unos 772.000 metros cuadrados.