VALÈNCIA. (EP).El municipio valenciano de Buñol ha vuelto a teñir sus calles de rojo, un año más, con la Tomatina, una tradición que consiste en el lanzamiento de tomates entre los participantes, y que este año ha alcanzado un "récord" de venta de entradas, según ha explicado la alcaldesa de la localidad, Juncal Carrascosa, que ha cifrado el aforo de este 2018 en unas 20.000 personas.
Durante el recorrido se han lanzando 145.000 kilos de tomates repartidos en siete camiones. El primero ha comenzado a circular a las 10.57 horas, cuando se ha escuchado la primera carcasa, mientras que la segunda, señal de la finalización del recorrido, ha sonado a las 12.00 horas.
Buñolenses y visitantes de todo el mundo han recibido a los camiones con cánticos de "tomate, tomate", a los que los camioneshan contestado con un constante sonido del claxon. Esta, de hecho, ha sido una de las ediciones más internacionales, ya que la han visitado los embajadores de Lituania y Bangladesh, "un poco en representación de la cantidad de países que nos visitan", ha manifestado Carrascosa.
En esta ocasión, Buñol no solo se ha teñido de rojo, también de morado, con camisetas que rinden homenaje a las mujeres víctimas de violencia de género y que han llevado miembros de la organización, también desde los propios camiones. Una de las novedades de esta edición ha sido la instauración de puntos violeta, cuyo objetivo es actuar contra los posibles casos de acoso y dar protección a las víctimas.
"Hay muy buen ambiente y no ha habido ningún incidente", ha asegurado la alcaldesa del municipio.
En esta edición se instalará un punto violeta, en el que representantes del Movimiento Mujeres Democráticas de Buñol y otras voluntarias, que lucirán camisetas moradas, acompañarán a aquellas personas que hayan sufrido algún tipo de acoso o agresión y le servirán de enlace con las fuerzas de seguridad.
De esta manera, La Tomatina muestra su compromiso en la lucha contra la violencia machista, ya que con las camisetas moradas también homenajearán a las víctimas de este tipo de violencia para "recordar la necesidad de erradicar esta lacra social e impulsar un gran cambio social", afirmó en la presentación el responsable de la fiesta, Rafa Pérez.
Con todos estos ingredientes, la Tomatina 2018 llega cuatro días después de la celebración de su edición infantil, que el pasado sábado 25 utilizó 8.000 kilos de tomate para que los más pequeños conozcan "las normas de esta fiesta" y las próximas generaciones la continúen", según indicó el concejal responsable del evento y primer teniente de alcalde de Buñol, Rafael Pérez.
En la página web del Ayuntamiento se han vendido entradas para la fiesta a personas de todas las nacionalidades, pero también se podrán conseguir en taquilla este mismo miércoles. De momento, con datos de la semana pasada, la mayoría las compraron españoles, ingleses, estadounidenses, franceses y australianos.
La imagen del cartel de este año, diseñada por Socarrat Studio, muestra unos tomates pixelados que recuerdan a los videojuegos arcade de los años ochenta, una propuesta que entronca con la presencia cada vez más constante de la tecnología en la actualidad, según explicó el representante de Socarrat, Miguel Sanfeliu.
De esa idea surge 'Tomatina&Go', una 'app' gratuita, diseñada por Socarrat y creada por Play&Go Experience, que sigue los parámetros del juego 'PokemonGo' e invita a recorrer Buñol para conocerlo y conseguir premios. La herramienta también informa sobre los servicios municipales y la ubicación de emplazamientos destacados, así como de la agenda sobre fiestas y eventos destacados.
La aplicación estará activa durante todo el año y también se desarrolla en València, donde conecta los principales monumentos de la capital con destacados emplazamientos turísticos de Buñol. El objetivo es aprovechar las sinergias que genera La Tomatina para que los usuarios puedan conocer la riqueza cultural y artística de Buñol.