Santi Vallés, Ximo Puig y Sagredo, durante su visita al paredón de Paterna.VALÈNCIA. Compromís per Paterna ha presentado al pleno del Ayuntamiento de esta ciudad una moción para pedir al Ministerio de Justicia la nulidad de los juicios sumarísimos de posguerra, según ha informado la formación en un comunicado. Asimismo, esta iniciativa plantea también la construcción de un memorial con el nombre de los más de 2.000 personas fusiladas en el llamado 'camino de la sangre' de esta localidad, que transcurre entre el Terrer, donde se realizaron las ejecuciones, y el cementerio, donde están las fosas con los cuerpos de los represaliados por el franquismo.
El portavoz de Compromís per Paterna y primer teniente de alcalde en el municipio, Juanma Ramón, ha señalado que esta ciudad "tiene una herida abierta sobre la que no se puede construir una sociedad democrática justa". "Esta herida, producto de la barbarie franquista se tiene que cerrar con justicia y reposición y no con olvido", ha subrayado.
La moción se refiere a la "represión sistemática y brutal sobre la población civil" llevada a cabo por el franquismo y el representante de Compromís destaca que esa represión "hoy en día todavía no se ha investigado ni reparado", como tampoco "la memoria de los represaliados". En consecuencia, la moción de Compromís pretende ser un apoyo "a las familias de los fusilados por el régimen franquista".
La iniciativa prevé "la creación de una asociación de municipios con víctimas de la represión franquista a la que se puedan dirigir todos aquellos que todavía buscan a sus familiares fusilados durante la posguerra", además de pedir "la nulidad de los juicios sumarísimos que desembocaron en los más de 2.000 fusilamientos por causas políticas". Igualmente, reclama "la construcción de un centro de interpretación de la posguerra y la represión franquista donde, además, se atienda e informe a los familiares de represaliados".
Compromís ha asegurado que con esta moción pretende "hacer eco de las reivindicaciones de las diferentes asociaciones que trabajan por la recuperación de la memoria histórica y la reparación y justicia de las personas represaliadas".
"Es nuestra responsabilidad institucional y, sobre todo, moral hacer justicia y acompañar a las familias que día tras día abocan lágrimas a pie de fosa. Es deber de una sociedad democrática y madura cerrar las heridas producidas por años de represión de un gobierno dictatorial que se perpetuó en el poder a base de la eliminación física de sus oponentes", ha manifestado Ramón, que ha instado así a "reconocer los errores y tratar justamente a las víctimas de un estado injusto".
