VALÈNCIA (EFE). La Conselleria de Agricultura, Agua, Ganadería y Pesca ha aprobado el pago de ayudas por 5,7 millones de euros a los pescadores de la Comunitat Valenciana, correspondientes al paro biológico del año 2023.
Con esta medida "cumplimos con el compromiso adquirido con los pescadores, y más aún en un momento tan complicado como el que están viviendo ahora por la falta de gestión y de defensa por parte del Gobierno de España", ha afirmado el conseller de Agricultura, Agua, Ganadería y Pesca, Miguel Barrachina.
La Conselleria ha aprobado 323 solicitudes de ayudas, y del importe total, 5,4 millones de euros irán destinados a los armadores y el resto a los tripulantes que lo han solicitado, según han informado este lunes fuentes de la Generalitat.
En la provincia de Alicante se han concedido 3 millones de euros, en la de Castellón 2,2 millones y en la de Valencia 500.000 euros de unas ayudas que están cofinanciadas en un 70 % por el FEMPA (Fondo Europeo Marítimo de Pesca y Acuicultura) y en un 30 % por la Administración General del Estado.
Barrachina ha explicado que, dentro de esta convocatoria, además de subvencionar la parada temporal de 2023, se han incluido excepcionalmente los días de parada de 2022 que no pudieron optar a la ayuda en su momento por haber alcanzado el máximo de 180 que permitía financiar el FEMP (Fondo Europeo Marítimo y de Pesca).
El conseller ha recordado que, el próximo miércoles, se mantendrá una reunión con el ministro de Agricultura, Luis Planas, en la que le trasladará "la difícil situación que padece el sector y las propuestas del Consell de Carlos Mazón para dar solución a la falta de días para faenar".
Ha destacado que el Consell de Mazón "será el primero en compensar los recortes en la pesca impuestos por la Unión Europea", con 2,8 millones de euros en ayudas directas e inmediatas para financiar el 100 % del cambio de redes.
"Queremos que la pesca siga siendo sector económico clave en la Comunitat Valenciana, y por eso no vamos a permitir que normas impuestas contra todo sentido común acaben con una profesión arraigada en nuestro territorio y que, además de ser una seña de identidad, es economía y empleo", ha concluido.