VALÈNCIA (EP). La Conselleria de Sanidad reclama al Gobierno de España 723,3 millones de euros correspondiente al importe adeudado a la Comunitat Valenciana por la atención sanitaria a personas desplazadas de otras Comunidades Autónomas, así como la atención al colectivo de extranjeros.
Esta cantidad pendiente de cobro responde a "la inoperatividad" de los mecanismos establecidos para la compensación de este gasto sanitario, el Fondo de Garantía Asistencial y el Fondo de Cohesión Sanitaria, según han señalado fuentes de la Generalitat.
Al respecto, recuerdan que el RDL 16/2012 creó el Fondo de Garantía Asistencial (Foga) para articular la compensación de gasto sanitario entre comunidades autónomas emisoras y receptoras de personas desplazadas, y que "debería haber resuelto el desequilibrio" que sufren las comunidades autónomas de carácter turístico en la atención de desplazados temporales procedentes de otros territorios.
Sin embargo, casi 10 años después de su aprobación, el RDL 16/2012 solo se ha desarrollado desde enero de 2014 para compensar la asistencia primaria y recetas de farmacia, pero no en el ámbito de la asistencia especializada.
Por ello, existen importes sin abonar en primaria y receta anteriores a 2014, que suman 23,1 millones, así como otros 558,4 millones correspondientes a la atención especializada. A ello hay que sumar otros 55,5 millones de euros por liquidaciones pendientes del Fondo de Cohesión Sanitaria.
Entre todos estos conceptos, la deuda acumulada con la Comunitat Valenciana desde 2012 en concepto de atención a desplazados nacionales asciende a 637 millones de euros.
Respecto a los desplazados extranjeros, de acuerdo con la normativa vigente, la Conselleria de Sanidad factura la atención sanitaria a los ciudadanos con Tarjeta Sanitaria Europea o procedentes de países con convenio de asistencia sanitaria recíproca.
Sin embargo, pese a que son las comunidades quienes facturan la atención a los pacientes extranjeros, los pagos que realizan los terceros países por los cuidados a sus ciudadanos se canalizan a través de la Administración del Estado, en concreto, a través del Instituto Nacional de la Seguridad Social y el Ministerio de Sanidad.
En concreto, la Comunitat Valenciana ha facturado entre 2003 y 2020 un total de 371,25 millones por la atención a pacientes internacionales mientras que en ese tiempo ha recibido del Estado 284,91 millones. De esta forma, la diferencia entre lo facturado y el dinero liquidado por el Estado por este concepto arroja un desequilibrio que supone un perjuicio de 86,33 millones de euros acumulados entre 2003 y 2020.
De este modo, la suma entre la deuda acumulada con la Comunitat Valenciana en concepto de atención a desplazados nacionales, 637 millones, y las pérdidas en la atención a pacientes extranjeros, 86,3 millones, arroja una cantidad de 723,3 millones de euros adeudados como "consecuencia de la falta de compensación adecuada por esta prestación asistencial".