VALÈNCIA (EFE). El conseller de Sanidad, Marciano Gómez, ha defendido este viernes que la decisión de revertir las concesiones de los departamentos de Dénia y Manises a la gestión pública en 2024 está "absolutamente alejada de la ideología" y se ha adoptado pensando "en lo que más beneficia al ciudadano".
Ha insistido en que la decisión adoptada está basada "en la eficacia y en la eficiencia" y en la calidad del servicio para los ciudadanía, y se ha reflexionado tras estudiar la situación sanitaria, el aspecto social, el aspecto laboral y los matices jurídicos.
En declaraciones a periodistas en un acto con motivo del Día de la Enfermería, ha admitido que en estas dos concesiones había un "clima social que ya estaba muy caldeado por el Botànic", donde los trabajadores estaban "claramente a disgusto", y ha agradecido a los dos comité de empresa que se hayan puesto a disposición de la Conselleria para este proceso.
"Es algo absolutamente novedoso y que demuestra nuestra capacidad de diálogo y de hacer las cosas como se tienen que hacer, colaborando con los profesionales, cosa que no pasó en Alzira y en Torrevieja", ha afirmado el conseller, quien ha hecho hincapié en que se ha buscado una decisión "global" y "definitiva" que no tuviera "fisuras".
Así, ha explicado que se ha tomado una decisión para que no haya fisuras ni asistenciales, ni sociales, ni laborales ni jurídicas, porque al final todo esto podría haber repercutido en la calidad del servicio prestado a la ciudadanía o haber llevado a una situación que se "enquistase".
Si hubiera sido una decisión "ideológica o sectaria", al día siguiente de llegar al Consell "la hubiéramos tomado y sin ningún problema", ha sostenido el conseller, quien ha insistido en que se han analizado "muchísimos datos" durante dos o tres meses, para que los ciudadanos "no padezcan los riesgos de una precipitación política mal tomada".
"No es ningún éxito de nadie, es un éxito de querer tener la mejor sanidad para los ciudadanos valencianos que se la merece", ha afirmado el conseller, quien ha insistido en que se va a garantizar una transición del modelo concesional a la gestión directa forma "ordenada, rigurosa, sensata" y en la que los ciudadanos no sufran "el caos" que existió con las reversiones de Alzira y Torrevieja.
Sobre si a los trabajadores de esos departamentos de salud se les aplicará la figura jurídica de personal laboral a extinguir, ha explicado que a día de hoy tendrá que ser así, pero están trabajando para que esta legislatura se presente un proyecto de ley en el que se iguale el régimen jurídico laboral de todos los trabajadores sanitarios, para que no haya "de primera" y "de segunda, como hizo el Botànic".
Preguntado por el departamento de salud de Elche-Crevillent, ha indicado que, si sigue con los datos que tiene a día de hoy y "siguen trabajando bien" la Conselleria irá "a lo mejor, lo más eficaz y lo más eficiente para los ciudadanos, sin ideología".
"Nosotros no vamos a privatizar ni a desprivatizar, vamos a trabajar para que el ciudadano tenga lo mejor", ha insistido el conseller.
Marciano Gómez ha agradecido la colaboración de las empresas concesionarias, de las que ha dicho que "son conscientes" de que no se puede repetir los "episodios caóticos" de antaño, cuando acabó el contrato de otras concesiones.