Cristina Gamón: "En el arte contemporáneo conviven varios lenguajes a la vez, ya no hay barreras"

VALÈNCIA. Cristina Gamón (Valencia, 1987) ha vuelto a València para presentar su trabajo Espejismos, una serie de 10 obras inéditas que se encuentran expuestas en Shiras Galería, con motivo de la celebración de Abierto Valencia 2021, el gran evento de apertura de las galerías de arte contemporáneo de la Comunitat. Galardonada con el Premio adquisición por la Fundación Juan José Castellano Comenge y con el Premio adquisición por la revista Makma, Gamón se ha convertido en una de las protagonistas de este inicio de temporada expositivo, con un proyecto en el que todo es cuestión de reflejos.

Un recorrido único

Cuando el espectador se adentra en Galería Shiras se enfrenta a un recorrido visual inédito y pensado para generar una conexión emocional. Para Gamón, las exposiciones individuales que lleva realizando desde 2009 le suponen cada vez una nueva oportunidad de expresar plásticamente la temática de sus proyectos. “Construir el recorrido visual potencia lo que quieras expresar en ese momento”, explica en conversación con Culturplaza. “Al trabajar desde la abstracción no te puedes acoger a lo referencial para el discurso y, por lo tanto, los pesos visuales del color y del formato son elementos fundamentales en como te expresas”. Para la artista el mapeado expositivo es importante para que se perciban las emociones que quiere causar cuando el espectador se enfrenta al trabajo. En el caso concreto de Espejismos las piezas generan la reacción del espectador a través de sus materiales y, también, gracias a su recorrido.

El uso del metacrilato

Este nuevo trabajo, Gamón aborda la temática del espejo y su relación con la historia del arte haciendo referencia a la doble realidad que representa la tradición pictórica a través de la idea del reflejo como ilusionismo. A través de las piezas, creadas expresamente para la muestra, genera un sugerente recorrido en el que es tan importante la vibración global como los detalles del proceso. Nos cuenta Gamón que al principio comenzó trabajando con una pintura muy saturada, ya que le interesaba entender el lenguaje abstracto que estaba creando. “En ese sentido lo dominaba a través del color, las formas, el gesto de emoción y los recursos compositivos, con los que te enfrentas desde la abstracción a una pintura”. 

Más tarde la artista se dio cuenta de que el academicismo que estaba trabajando ahí le invitaba a tomar conciencia de por qué había decidido trabajar ese lenguaje sobre el soporte del metacrilato, que hace tan únicas a sus obras: “para mi trabajar con este material que es contemporáneo y que es transparente hace que la pintura sea como un mediador de conquista de ese espacio superficial.”

En sus obras el metacrilato permite que la emoción de la pintura sea accesible al espectador, aunque la pintura se encuentre detrás de esa barrera invisible, tal y como lo describe la artista. “De ahí el espacialismo y la ruptura con la tercera dimensión, era algo que me lo pedía el propio trabajo”. En Espejismos las piezas interactúan con el espectador a través de pequeños espacios que permiten que este vea a través de la obra. Para la artista estos son los encargados de dibujar otras formas a través de sombras arrojadas, dando así muchas más lecturas a su trabajo. "Es como un elemento más del vocabulario plástico”, declara.

Entre lo abstracto y lo figurativo

“En el arte contemporáneo conviven varios lenguajes a la vez, ya no hay barreras”, comenta la artista, que añade: "el debate abstracción/figuración o si es cultura y performance... creo que todo es un formato híbrido y hace ejemplo del tiempo en la que estamos, la era de la globalización y la posmodernidad también".

Para ella esto se puede contemplar en los certámenes, donde conviven diferentes lenguajes aunque sean de una misma disciplina: “Esa es la realidad en la que nos movemos, en un mundo de imágenes que entre abstracto y figurativo todo es abstracto al final. El propio concepto de arte es abstracto para mi”.

En cualquier caso, al final, prevalece la emoción. Afirma que “todo arte sin su público no genera nada”, es por ello que el recorrido de Espejismos invita al espectador a interactuar con las obras y obtener una visión panorámica de la sala en la que se encuentran. Para la artista esta exposición expresa “la idea sobre todo del espacio abismo en sí mismo, la necesidad de romper con la tercera dimensión en la pintura”.