MADRID (EFE). Algunos barones y dirigentes regionales del PSOE, entre ellos Ximo Puig, están criticando con dureza el "sectarismo" de la nueva dirección del PSOE y en especial la ausencia en el nuevo Comité Federal de referencias del partido como Eduardo Madina, Elena Valenciano, Antonio Hernando, José Blanco o José María Barreda.
El secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, ha conformado una Ejecutiva a su medida sin espacio para las candidaturas rivales, a excepción de otro aspirante a las primarias, Patxi López.
Uno de los más críticos ha sido el presidente de la Generalitat, Ximo Puig, que ha dicho hoy que alguien tendrá que explicar por qué se quiere debilitar su liderazgo al frente de un partido fuerte, como el PSPV-PSOE, y ha advertido de que esta situación podría afectar a la presidencia de la Generalitat.
En declaraciones en la clausura del 39 Congreso del PSOE y a la pregunta de si Ferraz está proponiendo un candidato alternativo a su liderazgo en el PSPV, Puig se ha preguntado cómo es posible que en el mejor momento del partido, en 22 años de historia, "se quiera romper eso".
También, el portavoz de socialista en el Parlamento asturiano, Fernando Lastra, ha alertado que, de mantenerse ese comportamiento por parte de la nueva Ejecutiva, el PSOE se encamina hacia un partido "donde la exclusión y el sectarismo van a ser la pauta".
Lastra, que forma parte del sector que respaldó a Susana Díaz en las elecciones primarias, ha asegurado que se trata de "la primera vez" que una dirección política no negocia la composición de un órgano de control como es el Comité Federal "que representa la pluralidad del partido".
De hecho, el hasta ahora presidente de la gestora del PSOE y presidente asturiano, Javier Fernández, ha decidido no asistir al mitin con el Sánchez cierra este 39 Congreso Federal.
Otro de los que ha criticado la nueva dirección del PSOE es el portavoz socialista en el Senado, Vicente Álvarez Areces, que cree "evidente" que en la nueva Ejecutiva del PSOE "no ha habido integración alguna".
No ha querido expresar sus reticencias a micrófono abierto la principal rival de Pedro Sánchez en las primarias, la presidenta de Andalucía, Susana Díaz, que ha dejado claro que ha votado la Ejecutiva propuesta del secretario general: "¡Cómo no voy a votar a mi Ejecutiva, que es la de mi partido!, ha dicho.
"Mi compañero Pedro tenía libertad absoluta para formar el equipo de gobierno, así ha sido y yo lo he respetado desde el primer día", ha aclarado.
Pese a las palabras de Susana Díaz, han sido muchos los miembros de la delegación andaluza que se han quejado de la composición de la Ejecutiva y, especialmente del Comité Federal, el máximo órgano del PSOE entre congresos y de la que han salido figuras del PSOE de las últimas décadas.
De hecho, la Ejecutiva solamente ha contado con el apoyo del 70,5 por ciento de los delegados que han acudido a votar, una cifra baja comparada con el 80,42 por ciento del anterior congreso.
También el presidente aragonés, Javier Lambán, uno de los más críticos con Sánchez en el proceso de primarias, no ha querido echar más leña al fuego.
Lambán ha dicho que es "razonable" que Sánchez haya configurado una Ejecutiva "a su imagen y semejanza, sin que nadie, fuera de su ámbito personal, determine la decisión".