El cocinero 'estrella' Ricard Camarena fue el responsable del diseño y gestión del menú servido en Valencia el pasado lunes al Príncipe Felipe y un grupo de comensale escogidos

VALENCIA. Ligero, frugal, sofisticado y ensoñador, todo al mismo tiempo, como solo los grandes maestros de la cocina saben ejecutar. En este caso, el maestro Ricard Camarena. De este modo describía algún experto el menú servido al Príncipe Felipe y sus 13 acompañantes en el restaurante valenciano La Embajada.

Los organizadores del ágape pidieron de forma eplícita materias primas "que no fueran lujosas o caras" y vinos "sencillos". Así, de primero, Camarena propuso hebras de corvina, berenjena asada y ajos encurtidos, con judía verde y jugo de tomate en salazón.

Rape estofado, col frita, jugo de alcaparras y berros, de segundo. Y de postre, café con leche quemada, mantequilla y macadamia. Lo vinos, correctos y locales: Enrique Mendoza chardonnay, Mestizaje y Casta Diva. Delicioso.