VALENCIA. La francesa Anne Fontaine estudia la psique de las mujeres de mediana edad en esta adaptación de un relato de la ganadora del Premio Nobel de Literatura Doris Lessing.

Ya en la cuarentena, Roz y Lil, encarnadas por Robin Wright y Naomi Watts, son dos grandes amigas, y así han sido desde su infancia creciendo juntas en una idílica ciudad costera. E igual que ellas, sus hijos adolescentes han desarrollado una amistad tan fuerte como el lazo que une también a sus madres.

Pero un perfecto verano los chicos, así como sus propias madres, se ven enfrentados al torbellino de emociones latentes que ha ido creciendo entre ellos durante los últimos años, cuando se enamoran cada una del hijo de la otra.

La película, una coproducción entre Francia y Australia, ha contado con la colaboración del prestigioso guionista británico Christopher Hampton, quien se dio a conocer por su adaptación de Las amistades peligrosas, y que ha dirigido películas como Carrington.

Junto a Wright y Watts destaca la presencia de los dos jóvenes actores australianos James Frecheville y Xavier Samuel, que encarnan a los bellos hijos de las dos protagonistas.

La película es a su vez un relato cargado de erotismo sobre el amor ciego y una celebración de la eterna naturaleza de la amistad femenina. Profundamente emotiva y apasionante, Dos madres perfectas plantea un tremendo drama moral sobre la familia, la sensualidad, la compasión y, por encima de todo, el amor.