Con esta nueva instalación, que ha supuesto una inversión de 994.767 euros, vuelven a entrar en vigor los procedimientos de atenuación de ruidos para los despegues que se implantaron en marzo de 2010 dentro de los acuerdos establecidos en el GTTR (Grupo Técnico de Trabajo de Ruidos) del Aeropuerto de Valencia, constituido por Aena y por los ayuntamientos próximos que están dentro de la huella acústica.
Un VOR es un radiofaro omnidireccional instalado en tierra que emite en los 360 grados alrededor del mismo y permite a las aeronaves conocer su posición y la distancia con respecto a la estación emisora. Según Aena, la nueva instalación del aeropuerto valenciano "evitará interferencias no solo radioeléctricas sino también debidas a cualquier objeto o estructura en las proximidades o dentro del recinto aeroportuario".
