VALENCIA. La absolución de Francisco Camps en la causa de los ‘trajes' ha removido los cimientos del PPCV. La incertidumbre en ciertos sectores del partido es lógica: las preguntas sobre el futuro del exjefe del Consell se agolpan en la actualidad mediática y, en cierta medida, resultan difíciles de responder para la actual dirección del partido.

Uno de los nombres propios importantes en este trance es el del presidente provincial del PP en Valencia, Alfonso Rus. El peso del también presidente de la Diputación es considerable para determinar el control del partido de cara a las próximas citas congresuales, dado que su influencia en alcaldes y presidentes locales es notable.

Según fuentes del partido, los contactos entre el presidente de la Generalitat y líder del PPCV, Alberto Fabra y Alfonso Rus, se han intensificado en los últimos días. Hoy escenificarán unidad en la Junta Provincial del partido que se celebrará en Valencia.

El mensaje de Rus era claro: apoyo al presidente Fabra en la difícil política de recortes emprendida y respaldo para culminar unos procesos congresuales sin sobresaltos. A cambio, la garantía de mayor diálogo con la dirección provincial de Valencia, que volverá a presidir Alfonso Rus, y consideración respecto a sus peticiones.

Desde la llegada de Alberto Fabra al poder, se han sucedido diversas situaciones en las que se ha suscitado la confrontación entre el presidente y diversos primeros espadas como Rita Barberá o el propio Rus. Ahora, con la coyuntura añadida de la absolución de Camps, el líder del PPCV necesita estabilizar y formalizar su control en el partido. Pese al apoyo moral de Rus al expresidente en el juicio, fuentes del partido subrayan que el dirigente provincial ha trasladado a Fabra en los últimos encuentros su respaldo para que lidere el partido sin sobresaltos.

De la misma manera, las declaraciones de Rita Barberá y Juan Cotino tras la absolución de Camps dirigidas a mantener la calma, perfilan las directrices del propio Mariano Rajoy a evitar conflictos y obstáculos de cara al congreso regional que debe afrontar Alberto Fabra en las próximas semanas. Así, con el apoyo de Rus, el actual presidente del partido alinea junto a él a uno de los dirigentes que inclina la balanza a su favor como medida preventiva para evitar conflictos orgánicos.