VALENCIA (C.S.). No es cuestión de comportarse como ursulinas escandalizadas ante cualquier acto de alegría y reverencia por la vida que celebre un semejante, pero no digan que no resulta chocante leer la deliciosa entrevista concedida al diario El Mundo por Juan de Dios Navarro, delegado del Consell en Alicante, en la que cita profusamente el concepto austeridad -"Somos los primeros en apretarnos el cinturón- y los sacrificios de la Administración a la que representa -"El Gobierno Valenciano fue el primero en ajustarse el sueldo"-, mientras comparte con el entrevistador un exquisito almuerzo seguramente digno de mejores, o al tal vez más oportunas, ocasiones.
Al menos debe agradecérsele a Juan de Dios que no se ocultara, aunque ello le esté valiendo severas críticas de algún -sin duda envidioso- alto cargo de la Generalitat que, abrumado por el límite de 20 euros impuesto para sus menús diarios, releía ayer con cierto estupor el menú del encuentro, y que el citado diario reproducía con todo detalle en el interior de la entrevista:
"Empezamos con una tortillita de patatas con trufa negra, después un delicioso bonito escabechado a la miel, alternándolo con un pincho de pulpo con salsa soyabi, y un corte de foie micuit con pan Kavli, y unas ostras Gillardeau del Nº2. Croquetas de Jamón Iberico «Joselito» y la presa ibérica".
Como escrupulosamente describía el autor: "Por sus instalaciones -la sección del 'Gourmet' de unos conocidos grandes almacenes- podemos deambular haciéndonos el mejor menú a nuestro antojo, y para ello encontramos un fabuloso Joselito o auténtica cocina japonesa, e incluso una fantástica pastelería (en tan detallada descripción no figura la marca del espumoso con sus copas ad hoc que, sobre la mesa, se puede observar en la imagen que ilustra la entrevista, aunque un especialista de VP lo ha conseguido detectar: un Laurent Perrier, champagne, naturellement, aunque bastante flojo en opinión del experto).
¿Y quién pagaba la fiesta? Solo caben cuatro posibilidades: el entrevistado, el entrevistador, a escote o a cuenta del establecimiento donde se celebraba tan sucinto ágape. En fin, no parece que ninguna de las alternativas fuera demasiado apropiada para una intervención pública de un representante del gobierno autonómico que -se supone- debe ejemplarizar "el gran esfuerzo de austeridad y cumplimiento que está haciendo el presidente Fabra", como nuestro hombre tuvo a bien recordarnos en el transcurso de la entrevista. Novatos...
