VALENCIA (EFE). Medio centenar de trabajadores y extrabajadores de Radiotelevisión Valenciana (RTVV) se han concentrado esta tarde frente al Palau de la Generalitat para protestar por la decisión del Consell de cerrar el ente y han pedido la dimisión del president, Alberto Fabra.
Los trabajadores, algunos de ellos muy afectados y entre lágrimas, han asegurado que al hecho de no respetar las decisiones judiciales "se llama fascismo".
Fabra se ha reunido esta tarde con la directora general de RTVV, Rosa Vidal, para comunicarle la decisión del Gobierno valenciano de cerrar el ente tras la sentencia del Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat (TSJCV) que declara nulo el ERE que afecta a un millar de trabajadores.
Tras el encuentro, Rosa Vidal no ha hecho declaraciones a la multitud de medios de comunicación que se han acercado hasta la sede de la Generalitat.
Los trabajadores de RTVV han asegurado estar muy "sorprendidos" por la decisión del Consell y han indicado que "sospechaban que algo iba a pasar y se iba a adoptar una medida drástica, pero no esto".
Han asegurado que RTVV ha sido una televisión "manipulada por el gobierno del turno" en la que ellos "solo trabajaban, y han criticado el "poco respeto" que a su juicio tiene Alberto Fabra con ellos.
