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#OpiniónVP El Reino de Punset no es de este mundo

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La líder de Ciudadanos en la Comunitat demostró en las Corts, una vez más, su desconocimiento de la realidad valenciana

VALENCIA (FOTO: EVA MÁÑEZ). Carolina Punset es una persona inteligente que a veces dice cosas interesantes, pero las dice de cualquier manera, sin preparar el discurso, sin conocer a quién se dirige y con una sinceridad que deja al descubierto sus carencias. Por ejemplo, que la Comunitat Valenciana le importa un bledo, que más que una carencia es una falta de respeto por parte de alguien que pidió el voto para presidir la Generalitat.

El trilingüismo en la Educación es una postura técnica y políticamente defendible frente a la inmersión lingüística, pero para defenderlo en las Corts hay que hacerlo como María José Català, con argumentos y en valenciano. Si no, te matan, políticamente hablando, y Punset está ya más amortizada que Alberto Fabra, que se ha ganado la 'prejubilación' en el Senado, dicen que con Rita Barberá.

A Ximo Puig no le hizo falta machacar a Punset -podía haberlo hecho- en el debate de investidura, porque mientras él le explicaba en castellano, sin acritud, didáctico, por qué hay que defender el valenciano, las redes sociales hervían con las meteduras de pata de la máxima representante de Ciudadanos en la Comunitat, cuyo estigma de aquí en adelante será haber pensado que hablar valenciano es propio de aldeanos, aunque lo expresara de otra manera. Y no se lo quitará, que ahí la izquierda valenciana es inmisericorde desde antes de que existieran las redes sociales.

Haría bien Albert Rivera en buscar destino cuanto antes a esta ciudadana del mundo, porque si su partido acaba fichando a Toni Cantó y hacen tándem para las Generales, las carcajadas pueden acabar beneficiando a su enemigo a batir en la Comunitat, que no es otro que Compromís.

El antinacionalismo de Punset es tan extremo como el ultranacionalismo del ala norte del Bloc, empeñado en integrar el País Valencià en unos Països Catalans independientes. Tan legítima es una opción como la otra, pero no estamos para extremismos ni es lo que ha votado la inmensa mayoría de los valencianos, por más que los primeros tengan ahora voz en las Corts y los segundos vayan a tocar poder.

Según las encuestas del CIS, esta es la autonomía donde más porcentaje de población, más del 60%, se siente tan española como de su comunidad, y donde casi nadie responde que se siente solo valenciano, el 1,3%. Tabién es verdad que el CIS no pregunta en Valencia si alguien se siente solo catalán, que sería un dato interesante.

Así que, como bien sabe Ximo Puig, los valencianos tenemos ahora mismo muchos y muy graves problemas, pero el nacionalismo no es uno de ellos, salvo que alguien de uno u otro lado lo quiera convertir en un problema. El PP lo agitó hasta el último día con su Ley de Señas de Identidad para distraer la atención y cosechar unos cuantos votos. No nos regalen de nuevo ese espectáculo.

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