
VALENCIA. A Alberto Fabra le ha sentado fatal que la dirección del Partido Popular le haya reprochado los malos resultados en las pasadas elecciones europeas. El resquemor se hizo patente por primera vez el pasado jueves cuando Fabra compareció ante los medios de comunicación para anunciar el cambio en la portavocía del Consell. "A mi también me parecen malos los resultados del PP en España", dijo en forma de desquite cuando se le preguntó si desde Génova le habían dado un toque para que moviera ficha tras la pérdida de medio millón de votos en los comicios.
En esa misma comparecencia Fabra lanzó un mensaje vinculado a sus malos resultados electorales pero desviando las culpas a Madrid: "Los ciudadanos han castigado el mal trato que da el Gobierno de España a la Comunitat Valenciana en materia de financiación autonómica", aseguró el presidente de la Generalitat.
Ese mensaje no fue casual. De hecho, la consellera de Educación y nueva portavoz del Consell, María José Català, insistió en su primera rueda de prensa: "Los ciudadanos no están contentos con la relación del gobierno para con la Comunitat Valenciana, nosotros hemos hecho los esfuerzos que teníamos que hacer, y ahora le toca al Gobierno central".
Según confirmaron a ValenciaPlaza.com varios altos cargos de la Generalitat, el presidente ha ordenado elevar el tono de las reivindicaciones por la financiación. "Toca gritar", aseguró uno de ellos. Una estrategia que irá tomando forma en las próximas semanas.
Lo que habrá que ver es la reacción de Madrid y del ministro de Hacienda, Cristobal Montoro, a quien estas reivindicaciones no le gustan y menos si llegan de una comunidad a la que lleva prestando asistencia financiera desde hace dos años.