VALÈNCIA. La concejalía de Movilidad de València ya ha hecho público el estudio técnico que encargó el año pasado para analizar la viabilidad técnica y económica para erigir un aparcamiento en altura en el entorno del barrio del Cabanyal. Un documento que, tras analizar varias posibilidades, prevé que la inversión para esta infraestructura alcance los 5 millones de euros, según los cálculos realizados por el despacho de ingeniería.
El estudio, realizado por la compañía La Mingeniería, analiza la ubicación del parking en dos parcelas del barrio marítimo (la más grande y la más pequeña previstas para este uso) y teniendo en cuenta especialmente dos posibilidades: hacerlo con una construcción fija de hormigón, o mediante una instalación desmontable.
"Se descarta la utilización de tipología con ascensor para vehículos por no considerarse como una opción aplicable dado el elevado número de plazas que es posible disponer en las parcelas estudiadas", reza el documento al respecto, que sí tiene en cuenta la posibilidad de un parking robotizado, pero éste "incrementa considerablemente el coste de la actuación frente al resto de alternativas estudiadas".
Así, para la primera parcela, con más de 2.100 metros cuadrados de superficie disponible y cuatro plantas posibles, el estudio prevé que un aparcamiento de hormigón con rampas con 280 plazas costaría en torno a los 4,9 millones de euros. Cálculo un poco menor a la proyección para un parking desmontable con rampas, que dispondría de 265 plazas, pero cuyo coste ascendería a los 5,2 millones.
En la otra parcela, con menos de 1.000 metros cuadrados de superficie y tres alturas permitidas, la construcción del parking de hormigón supondría una inversión de casi dos millones de euros, mientras que, si fuera una instalación desmontable, el coste sería 50.000 euros más caro, según señalan las tablas elaboradas por la ingeniería.
De este modo, se concluye que los aparcamientos con rampas, los fabricados in situ son más económicos (entre 17.000 y 30.000 euros por plaza) y permiten mayor flexibilidad en su diseño, mientras que los aparcamientos con estructuras prefabricadas de acero y hormigón son menos económicos (entre 19.000 y 33.000 euros por plaza), pero más rápidos de ejecutar. La horquilla de precios se debe principalmente al aprovechamiento del solar el cual viene determinado por la forma y los condicionantes urbanísticos de alturas.
La concejalía de Movilidad, que dirige Jesús Carbonell, resaltó que, con todo, los aparcamientos en altura tendrían un menor coste que los subterráneos, a causa de la poca profundidad del nivel freático. A partir de ahora, el Ayuntamiento hará un sondeo de mercado para conocer la viabilidad económica de los aparcamientos. Según Carbonell, el estudio "da una idea aproximada del coste" de las infraestructuras, que "requerirían de una importante inversión, por lo que es necesario analizar y testear a través de un estudio de mercado su viabilidad económica".
En el barrio, y para "solventar los problemas de aparcamiento existentes", el gobierno municipal ya generó 135 nuevas plazas de aparcamiento en la avenida de los Naranjos. "Se barajan más medidas y, entre ellas, destaca la construcción de un aparcamiento en altura, teniendo en cuenta que si este se encontrara en la horquilla de entre 260 a 275 plazas el coste económico sería de alrededor de 5 millones de euros", asegura el consistorio, que valorará la posibilidad de licitar una concesión para la obra y la explotación del estacionamiento.
El edil de Compromís, Giuseppe Grezzi, exconcejal de Movilidad Sostenible, lamentó "la incapacidad del regidor de Tráfico Jesús Carbonell para dar soluciones a los problemas de aparcamiento que sufre el vecindario del barrio de Cabañal, que desde el inicio de la legislatura ha reclamado el establecimiento de la Zona de Residentes y que por respuesta ha obtenido solo promesas vacías para ganar tiempo".
"Ni el PP ahora ni el PSOE antes, cuando tenía la responsabilidad del Plan del Cabañal y prometía los aparcamientos en altura, han sido capaces de impulsar proyectos que den respuesta a las necesidades de los residentes del barrio", señaló, por lo que a su juicio "es ya una constante desde hace muchos años: hacen muchas promesas, pero no concretan nada":
Según Grezzi, durante los dos pasados mandatos no se hacían "promesas" sino que se llevaron a cabo "proyectos que han mejorado la calidad de vida de la gente". Así, puso de ejemplo el parking del Centre Históric-Mercat Central, las Zonas de Estacionamiento de Residentes en cuatro barrios, la peatonalización de la plaza del Ayuntamiento y la Reina, o el incremento de la red ciclista en un 60%.