De la atención primaria al concurso de hemodiálisis, los retos de la sanidad valenciana para 2025

VALÈNCIA. La Conselleria de Sanidad encara un 2025 con numerosos retos, algunos de ellos paralizados tras la situación de la Dana. Para el nuevo año que empieza, una de los puntos principales será avanzar con el nuevo decreto de Atención Primaria, que establece una serie de medidas organizativas y de gestión sanitaria entre las que destacan la organización jerárquica, la gestión compartida de la demanda y la incorporación de la inteligencia artificial.

En esta norma se plantea una nueva estructura jerárquica del personal sanitario de Atención Primaria y Comunitaria que se equipara a la de Atención Hospitalaria. Para ello, se crean las jefaturas de servicio asistencial de Atención Primaria y Comunitaria y las jefaturas de sección, con la finalidad de prestigiar a todos los profesionales por igual.  Paralelamente, se pretende impulsar la automatización de procesos a través de la inteligencia artificial. 

Un decreto rechazado por Satse, CCOO, UGT, Intersindical Salud y Simap al considerar que no ha habido una "negociación real" y que no recoge "una sola mejora asistencial para la ciudadanía, ni respecto a las condiciones laborales".  ¡A su juicio, el nuevo modelo supone un "retroceso" en la calidad asistencial de los ciudadanos y de la sanidad pública en general. También denunciaron que la Conselleria de Sanidad "no ha aceptado ninguna propuesta de calado" aportada por sindicatos, colegios profesionales o asociaciones para el proyecto.

¿Y las 35 horas?

Una de las cuestiones que por el momento están en el aire es la jornada de 35 horas para el personal sanitario. Desde el 11 de marzo no se ha convocado ninguna mesa de negociación para tratar el Decreto de Jornada tras decidir el departamento de Gómez que no aplicarían los acuerdos ya aprobados con el anterior Botànic para incorporarla de forma gradual. Desde los sindicatos reclamaron iniciar su implantación durante 2024, mientras que el Consell emplazó a 1 de enero de 2025.

Mientras, CSIF, CCOO Y UGT firmaron el XI acuerdo de legislatura, en un acto presidido por Carlos Mazón, donde se reconoce la aplicación de la jornada de 35 horas en todos los sectores de la Generalitat, siendo 2025 el primer plazo del calendario acordado. No obstante, los presentantes de los trabajadores consideraban que la propuesta alternativa de Sanidad a lo ya acordado supone un retroceso en derechos al entender que quiere anular la jornada compensatoria de la salida de guardia y de los días de vacaciones adicionales por prestar guardias en festivos y domingos, así como la supresión de la pausa para el descanso y otras medidas que suponen incrementos de jornada.

Gómez expresaba  su intención de reorganizar la Atención Primaria a partir de 2025, estableciendo que la jornada ordinaria sea de lunes a viernes, reservando los sábados exclusivamente para guardias de atención continuada y la implementación de IA para optimizar la gestión de citas.

El concurso de hemodiálisis 

2025 también será un año en el que Sanidad tendrá que volver a plantear dos de los concursos que más conflicto han traído en las últimas legislaturas: el servicio de hemodiálisis en los 24 departamentos de la Comunitat Valenciana . Fue en 2017 cuando se sacó la última licitación y se eliminaron 13 de las 16 mejores ofertas en la primera criba por dificultades con los pliegos. 

Una situación que generó una oleada de recursos de multinacionales y otras compañías que terminó por alargar hasta 4 años la adjudicación de la totalidad de los lotes e incluso el declarar desiertos otros tantos. Ahora, muchos de éstos empezarán a caducar tras la prórroga de un año que se podría ejecutar, pero será necesario empezar a plantear el nuevo concurso, que se encuentra por encima de los 100 millones de euros.

Estatutarización del personal

La Conselleria de Sanidad tenía prevista la estatutarización del personal de los consorcios en 2024, según recogía la ley de Presupuestos de 2024, donde se reflejaba la petición de los sindicatos para homogeneizar la situación de los trabajadores del Hospital General de València y el Hospital Provincial de Castellón y que permita la movilidad entre los diferentes departamentos. 

Sin embargo, esta cuestión no ha llegado a abordarse desde hace meses, a pesar de llevar gestándose desde hace años. En el departamento del General de València, más del 80% de los trabajadores son laborales a los que en 2017 se les homologó sus puestos con los de la administración valenciana. Por este motivo, una integración supondría una mayor facilidad de contratación para el departamento y una movilidad al completo de los empleados por la red pública. Mientras, en el Provincial de Castellón, la mayoría son funcionarios de la Diputación que se rigen por otras condiciones. 

Ambulancias

Los conductores de ambulancia en la Comunitat Valencia iniciaban una huelga indefinida en el mes de diciembre tras los numerosos reclamos a la contrata de la administración pública que presta el servicio para aumentar los salarios. Desde entonces, llevan movilizados para reclamar un "convenio laboral justo que ponga fin a la precarización que afecta a estos profesionales", quienes denuncian ser el personal low cost de la sanidad valenciana.

El colectivo de Técnicos en Emergencias Sanitarias (TES) lleva años reclamando mejoras salariales y laborales, enfrentándose a una patronal que, según ellos, no cumple los compromisos adquiridos con la Conselleria al adjudicarles el contrato público, que marcaba un incremento del 3% el próximo año. Los TES denuncian que en la Comunitat Valenciana perciben salarios significativamente inferiores en comparación con otras regiones del país. Una situación que tendrá que solucionar la administración valenciana y decidir si sigue la estela de otras autonomías que han decidido internalizarlo.

Hacer un nuevo PORH

En el mes de diciembre, Sanidad decidía prorrogar el Plan de Ordenación de Recursos Humanos (PORH) de nuevo. Un plan que lleva vigente desde 2019. Los sindicatos siempre han apuntado a este plan como papel mojado al no desarrollarse con los mínimos básicos que permitan planificar lo que está por venir.

Para los sindicatos, ésta es la herramienta que permite a la administración identificar qué personal tiene, qué quiere hacer y qué va a pasar por el camino. "Si tengo identificados a los profesionales, qué tipo y a dónde quiero llegar, te permite planificar las OPE, la formación especializada, si tengo que mejorar las condiciones de docencia o si las funciones que hacen son las adecuadas", señalan fuentes sindicales. En este sentido, tendrá que afrontar la confección de este documento, que en 2023 se llevó a mesa sectorial pero seguía sin ser del agrado de los sindicatos de la mesa sectorial.