MADRID (EP). La presidenta del Banco Santander, Ana Botín, ha confirmado que ha alcanzado un acuerdo con el presidente de LetterOne, Mikhail Fridman, que permite evitar la quiebra y el concurso de acreedores de Dia. "Finalmente el presidente de LetterOne se ha comprometido a trabajar para eliminar la discriminación entre bonistas y bancos de Dia, lo que creemos es un tratamiento justo. Santander de manera responsable ha decidido apoyar a Dia y sus empleados", ha asegurado la presidenta del Banco Santander en su cuenta personal de Twitter.
LetterOne, propietaria del 69,76% de Dia tras la OPA, y la entidad presidida por Ana Botín se encontraban inmersos en las negociaciones para lograr un acuerdo de los 17 bancos acreedores de la compañía, que representan el 77,5% de la financiación sindicada, con el fin de restaurar el equilibrio patrimonial y evitar la quiebra de la cadena de supermercados.
Ambas partes apuraron este lunes el plazo para intentar salvar a la cadena de supermecados y evitar que el consejo de administración de Dia tuviera que solicitar el preconcurso de acredores y acogerse al artículo 5 bis de la actual Ley Concursal con el fin de pactar un acuerdo de reestructuración de su deuda.
La presidenta del Banco Santander había criticado minutos antes en un acto, organizado por el 'Financial Times', que la sociedad del inversor ruso estaba ofreciendo a los bancos españoles acreedores de Dia condiciones muy inferiores a los bonistas extranjeros, aunque sí que había mostrado su deseo de "llegar a un acuerdo que fuera bueno para todos". Al final, Ana Botín ha conseguido que la firma del millonario ruso se comprometiera a trabajar para eliminar esa "discriminación" entre la banca y los bonistas de la cadena de supermercados.
Las acciones de la cadena de supermercados llegaron a dejarse más de un 5% a un precio de 0,607 euros tras conocerse las primeras declaraciones de la presidenta del Santander para terminar cerrando la jornada con una caída del 0,18%, hasta intercambiarse a 0,64 euros al final de la jornada bursátil.
Tras alcanzar 'in extremis' el acuerdo con la banca acreedora de la cadena de supermercados, LetterOne se había comprometido a suscribir su parte proporcional y a asegurar (u obtener el aseguramiento de un banco) un aumento de capital de 500 millones de euros que permitirá a la firma revertir la situación en la que se encuentra.
Dia registró unas pérdidas netas de 144,4 millones de euros en el primer trimestre del año, frente a los 'números rojos' de 16,2 millones de euros que se anotó un año antes. La deuda financiera neta (excluida IFRS 16) sumó un total de 1.702 millones de euros a final de marzo de 2019, lo que representa un incremento de 251 millones de euros respecto a finales del año 2018. El balance consolidado de la compañía cuenta con unos fondos propios negativos de 308,5 millones de euros a finales de marzo de 2019.
Mientras tanto, la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) se encuentra analizando las declaraciones y el tuit de la presidenta de Banco Santander, Ana Botín, confirmando que ha alcanzado un acuerdo con el presidente de LetterOne, Mikhail Fridman, que permite evitar la quiebra y el concurso de acreedores de Dia.
Según ha indicado un portavoz del organismo supervisor de los mercados a Europa Press, ni las declaraciones de Botín a los medios esta tarde afirmando que LetterOne ofrece menos a los bancos españoles acreedores de Dia que a los bonistas extranjeros, ni su mensaje en Twitter minutos después anunciando un acuerdo con el presidente de LetterOne para "eliminar la discriminación entre bonistas y bancos de Dia", han pasado inadvertidas para la CNMV. Por tanto, el organismo presidido por Sebastián Albella ha confirmado que está "estudiando o analizando" cómo se han producido estas declaraciones y qué efecto han tenido, sin que se haya abierto ningún tipo de investigación formal.