VALÈNCIA. La guerra comercial que libran Estados Unidos y China comienza a pasar factura sobre los mercados financieros. Sin ir más lejos ayer el Ibex 35 protagonizó una fuerte caída del 1,57% -como el resto de los principales índices del planeta- ante el recrudecimiento de las disputas de norteamericanos y chinos.
La Administración china respondió ayer a Donald Trump con nuevos aranceles contra productos importados de China, acusando a Washington de "matonismo comercial" y anunciando contramedidas pero sin dar detalles (de momento). El anuncio estadounidense de que aplicará aranceles a productos importados de China por valor de 200.000 millones de dólares tiene un alcance muy superior a las medidas a productos por 34.000 millones de la pasada semana y profundizan la guerra comercial entre las dos superpotencias económicas.
En pos de ofrecer a los lectores de Valencia Plaza una mayor pluralidad de opiniones, este diario se ha puesto en contacto con diez financieros de la Comunitat Valenciana para conocer sus impresiones sobre si dichas tensiones podrían derivar en un guerra comercial de calado, el impacto que puede tener sobre la bolsa española y qué deben hacer los bolsistas a las puertas del periodo vacacional, lo que aumenta todavía más la volatilidad por la caída de los volúmenes de contratación. A continuación sus impresiones:
Ricardo González, gestor del fondo GPM International Capital
-¿Se desencadenará una guerra comercial de calado ante los cruces de declaraciones -y aranceles- entre EE UU y China?
-Es una pregunta difícil de contestar pero si atendemos al comportamiento de los mercados, claramente esta tensión está afectando más a China que a EE UU. Desde finales de enero, el mercado de valores de Shanghái ha caído un 20,5% y el de Hong Kong un 13%. Por su parte, las bolsas americanas -tomando como referencia el S&P 500- han retrocedido apenas un 2%. Al final los mercados, que para mí son la prueba del algodón, nos están diciendo que Estados Unidos se comporta mejor que los mercados asiáticos en este contexto. De ahí que como inversores siempre es mejor estar posicionados del lado del mercado más fuerte, ya que a la larga son los que tienden a ofrecer más alegrías a sus accionistas.
-¿Cómo puede afectar sobre la bolsa española?
-La bolsa española tiene un problema que viene de antes de esta guerra comercial. El mercado español lleva experimentando un peor comportamiento relativo que la mayoría de bolsas mundiales desde el verano de 2017. Esto no es bueno, ya que sitúa a la bolsa española como un mercado débil y este tipo de mercados son los que más tienden a sufrir cuando la situación bursátil se vuelve inestable.
-¿Qué recomendaría hacer en estos momentos donde la mayoría de inversores está pensando en las vacaciones?
-Lo que hay que hacer en este tipo de entornos no difiere en exceso con respecto a lo que debemos de hacer siempre como inversores. Hay que estar fuera de los mercados más débiles como son ahora las bolsas chinas y las europeas, y estar invertidos en los mercados que mejor comportamiento estén experimentando. Dentro de esos mercados líderes tenemos ahora mismo a EE UU -especialmente la tecnología- y mercados estrechamente correlacionados con las materias primas como, por ejemplo, la bolsa australiana.
Eduardo Bolinches, director de Bolsacash
-¿Se desencadenará una guerra comercial de calado ante los cruces de declaraciones -y aranceles- entre EE UU y China?
-La guerra comercial ya está iniciada de hace varias semanas y lo que ha pasado ahora es que se ha pasado de las palabras a los hechos. Es lógico y normal que la pelota vaya haciéndose más grande cada vez y los montantes de las contrapartidas se incrementen. Lo peor está por llegar y hablaremos de importes muy altos cuando le llegue el turno a los teléfonos móviles, ordenadores y accesorios. Lo único que puede frenar a Donald Trump de esta espiral arancelaria sería un desplome del mercado de valores estadounidense, pero viendo las descompensaciones de las exportaciones con China -135.000 millones de dólares frente a los más de 500.000 millones de China- no parece que vaya a ocurrir eso, por lo que tenemos guerra para rato.
-¿Cómo puede afectar sobre la bolsa española?
-Este tipo de acontecimientos siempre va a provocar correcciones en los mercados de valores a nivel global, pero mucho más acusadas en la bolsa china que en la estadounidense, por lo que en la medida que no veamos pérdidas de soportes relevantes en Wall Street no hay por lo que preocuparse demasiado. Sin embargo, el mercado español tenía pendiente una recogida de beneficios tras las importantes subidas de comienzos de este mes y es normal que aproveche estos acontecimientos para acometerla.
-¿Qué recomendaría hacer en estos momentos donde la mayoría de inversores está pensando en las vacaciones?
-Veo al mercado español muy lateralizado y con serios problemas para reconquistar los 10.000 puntos. Con esta corrección vamos a tener importantes pistas en el corto plazo. Lo más importante es ver dónde se produce el freno de la recogida de beneficios. Si es ante los 9.700 puntos y volvemos a atacar los 10.000 puntos con éxito, entonces sería el escenario perfecto para mantener la cartera sin problemas. Sin embargo, si profundizamos la caída y acabamos perdiendo los 9.635 puntos, el riesgo de perder los mínimos de mayo son muy altos y yo cubriría toda la cartera para desaparecer del mercado mientras que no nos acercáramos a los 9.000 puntos o recuperásemos los 10.000.
Antonio Aspas, cofundador de Buy & Hold Capital
-¿Se desencadenará una guerra comercial de calado ante los cruces de declaraciones -y aranceles- entre EE UU y China?
-Por lo visto hasta ahora en los casos del acuerdo NAFTA con México y Canadá y con el conflicto con Corea del Norte, la táctica negociadora de Trump parece ser la de hacer unas peticiones de máximos para posteriormente negociar unos acuerdos con pequeñas concesiones. Esperamos que con China suceda lo mismo y finalmente EE UU se conforme con algunas concesiones por parte de China y se pueda evitar una guerra comercial total.
-¿Cómo puede afectar sobre la bolsa española?
-Actualmente la principal preocupación de las bolsas es si la economía va a entrar en una época de enfriamiento tras varios años de crecimiento económico. Las noticias sobre la posible guerra comercial con China e incluso con Europa -con las noticias sobre un aumento a los aranceles para la importación de vehículos europeos- suponen que el mercado le de mayores posibilidades a un enfriamiento económico y castigue a los sectores más cíclicos como son los industriales o el sector financiero.
-¿Qué recomendaría hacer en estos momentos donde la mayoría de inversores está pensando en las vacaciones?
-Siempre existen amenazas y riesgos para los inversores en bolsa, por eso les recomendaría que se olviden del ruido a corto plazo e inviertan pensando en el largo plazo, donde la bolsa es la mejor alternativa. Intentar hacer 'market timing', al igual que apostar en el casino, puede resultar muy divertido pero económicamente poco productivo.
Víctor Ruiz, director de Qrenta AV en València
-¿Se desencadenará una guerra comercial de calado ante los cruces de declaraciones -y aranceles- entre EE UU y China?
-Nuestra opinión es que la guerra comercial anunciada por Trump obedece realmente a intereses geopolíticos donde Estados Unidos lucha por el liderazgo tecnológico. Si bien nos encontramos en una espiral de acción/reacción, que es ciertamente preocupante, pensamos que las negociaciones reducirán finalmente las consecuencias. No descartamos que esta situación acabe con reformas en el seno de la Organización Mundial del Comercio (OMC).
-¿Cómo puede afectar sobre la bolsa española?
-La bolsa española actualmente está afectada por la volatilidad ante las consecuencias de la guerra comercial y la apreciación de la divisa americana, que afecta a la deuda de los países emergentes y, por tanto, a los valores del sistema financiero expuestos a estos mercados. Si bien la volatilidad va a continuar, consideramos que la valoración de la bolsa española está en niveles muy competitivos.
-¿Qué recomendaría hacer en estos momentos donde la mayoría de inversores está pensando en las vacaciones?
-Si bien el ruido de fondo en el corto plazo continúa en niveles altos, hay que estar expectantes ante la avalancha de resultados empresariales. Los anticipados en Estados Unidos son positivos, así que pese a la cautela no hay razones para dejarse arrastrar por el pesimismo.
Francisco Varea, cofundador de Edetania Patrimonios
-¿Se desencadenará una guerra comercial de calado ante los cruces de declaraciones -y aranceles- entre EE UU y China?
-Nos da la sensación que Trump está gobernando Estados Unidos como si se tratase de su empresa y que siempre le gusta ir muy fuerte antes de cualquier negociación. Entendemos que a nadie le interesa una guerra comercial y que en EE UU hay elecciones este noviembre, por lo que nuestro escenario central sigue siendo que se acabarán llegando a acuerdos bilaterales donde Estados Unidos saldrá beneficiado y obtendrá mejores condiciones que las actuales. Mientras tanto el ruido persistirá, por lo que tendremos una cierta volatilidad en los mercados según se vayan desencadenando los acontecimientos.
-¿Cómo puede afectar sobre la bolsa española?
-Por el peso que tiene en el sector financiero, que siempre es el más vulnerable ante las incertidumbres, tendremos un mercado nervioso. El mercado español continuará con su dualidad: por un lado, unas pequeñas compañías haciéndolo bien por el ciclo de la economía española y por flujos de entrada de dinero y, por otro lado, unas grandes compañías muy afectadas por todas estas noticias políticas. Esta semana ha empezado la campaña de resultados del segundo trimestre en EE UU y esperamos que los buenos resultados empresariales puedan compensar este ruido geopolítico. A corto plazo, el mercado continuará volátil y más con la reducción del volumen de contratación por el verano
-¿Qué recomendaría hacer en estos momentos donde la mayoría de inversores está pensando en las vacaciones?
-Después de un primer semestre de mercados negativos, esperamos que esta segunda parte del año lo hagan mejor, apoyados por los resultados empresariales y por la reducción de las tensiones geopolíticas. Si las posiciones que tenemos en cartera son en valores sólidos habría que mantenerse y esperar a que las aguas vuelvan a su cauce, ya que actualmente hay compañías que están cotizando a precios atractivos y el escenario de fondo del mercado es positivo.
Juan Miguel Damià, director de Tressis en València
-¿Se desencadenará una guerra comercial de calado ante los cruces de declaraciones -y aranceles- entre EE UU y China?
-La mayoría de analistas han venido considerando hasta ahora como poco probable que se intensificara la guerra comercial. Hay que diferenciar entre los aranceles que ya están aprobados y los que están 'sobre amenaza'. En una nota de mercado que sacó hace unos días JP Morgan AM decían que los 54.000 millones de dólares en importaciones gravadas equivale a apenas el 2% del total de importaciones estadounidenses y al 0,3% de su PIB; mientras que los 22.000 millones en exportaciones gravadas por sus socios comerciales no llegaba al 1% del total de exportaciones de EE UU. Esto significa que esas cifras no llegan a ser significativas para hablar de impacto sobre crecimiento e inflación en el país. El problema es la amenaza latente sobre nuevas medidas, que llevan a otros 500.000 millones de dólares a estar bajo el foco de nuevos aranceles. Esta semana se acaba de anunciar que de esa cifra 200.000 millones de dólares pasan a dejar de ser amenaza a convertirse en realidad (a falta de entrar en vigor, de momento el órdago está lanzado). Eso son palabras mayores porque si China toma contramedidas la escalada hasta culminar esa cifra total no estaría tan lejos; y entonces hablaríamos de un impacto sobre más del 4% del PIB de EE UU. Esperemos que al final se imponga la cordura en ambas partes y pueda haber una solución de consenso intermedia. No dejemos de lado que, por la parte europea, las medidas ya impuestas al acero y aluminio quedarían en nada comparadas con la investigación sobre posible gravamen a automóviles y piezas de automóvil por amenazas contra la seguridad nacional donde nos jugamos mucho más.
-¿Cómo puede afectar sobre la bolsa española?
-La bolsa española no es ajena a la incertidumbre y volatilidad que genera una posible guerra comercial a gran escala y, por tanto, sufre también con los acontecimientos que se van conociendo. Lógicamente el temor a que el sector automóvil -donde Europa tiene mucho más que decir- se vea perjudicado con potenciales aranceles genera mucha mayor inquietud por parte de analistas y empresas. Como comentaba antes de ayer en el blog nuestro director de Inversiones, Ignacio Perea, "en un mundo donde la generación de valor de un producto se reparte de manera global, los perjudicados por una guerra comercial son difíciles de identificar"; pero lo que está claro es que el impacto sobre la economía mundial no puede ser sino negativo. De ahí habría que ver la magnitud que podría tener -para empresas y para consumidores- y si hubiera transmisión de aranceles al precio final de los productos y cómo podría afectar a la evolución de la inflación y esta a su vez a la política de la FED. El temor a todo este círculo vicioso es el que puede descontar el mercado y penalizar a las bolsas... incluida la española. A pesar de todo el temor aparejado a nivel macro los indicadores siguen saliendo relativamente positivos y el crecimiento mundial sigue adelante -esperemos que temas políticos no empañen esta inercia- porque la guerra comercial puede acabar en un juego en el que no haya ganador, en el que todos perdamos.
-¿Qué recomendaría hacer en estos momentos donde la mayoría de inversores está pensando en las vacaciones?
-Se trata de un tema de origen político y el calendario político nos hace pensar que no perderá comba durante el verano. En EE UU, el 6 de noviembre tenemos la Midterm Election donde se renovará la totalidad del Congreso y un tercio del Senado, y Trump está en campaña intentando influir todo lo posible en política exterior (una de las áreas donde el presidente tiene mayor autonomía) para dar mayor visibilidad y relevancia a lo que su Gobierno está haciendo por sus ciudadanos; y así evitar que el resultado de las elecciones pueda mostrar un mayor sesgo demócrata en las instituciones. Las vacaciones son históricamente un periodo de menor volumen de contratación y, por tanto, de mayor nivel de impacto sobre las cotizaciones de lo que vaya aconteciendo. Este año, además de los otros temas que pueda haber sobre el tapete, si durante esta época se avanza en las tensiones comerciales, sea para recrudecerse o para visualizar soluciones menos dañinas para todos, pues seguramente habrá mayor brusquedad en las oscilaciones de los precios. Al final se trata de que el inversor esté 'cómodo' con sus inversiones y dejar los deberes hechos. Si se trata de inversores que están asesorados y/o gestionados en una entidad, lo lógico sería que la cartera esté preparada para afrontar el período, o que tenga plan de acción en función de lo que vaya ocurriendo. Para el inversor más autónomo, tendrá que estar más pendiente de ella o valorar si vale la pena hacer una pausa en aquellas posiciones que crea que puedan verse más afectadas, sabiendo que nadie tiene la bola de cristal.
Araceli de Frutos, fundadora de la EAFI del mismo nombre
-¿Se desencadenará una guerra comercial de calado ante los cruces de declaraciones -y aranceles- entre EE UU y China?
-De momento estamos asistiendo a un partido de tenis entre Trump y China; un peloteo que no sabemos quién tendrá el punto ganador pero que a los mercados les está dejando mareados. Ayer Trump volvió a sugerir más aranceles sobre determinadas importaciones procedentes de China, lo que provocó las caídas en las bolsas después de varias sesiones en 'tímido' positivo. Espero que no llegue la sangre al río y que no se meta más incertidumbre en el mercado de la ya existente. En los movimientos de mercado en estos últimos meses han dejado de primar los argumentos económicos para primar los políticos y así es muy difícil tomar sólidas decisiones de inversión. Se ha vuelto a una alta volatilidad muy puntual que se ha podido aprovechar pero no hay tranquilidad en los mercados.
-¿Cómo puede afectar sobre la bolsa española?
-Las caídas bursátiles, por contagio, es lo evidente. Luego los sectores de materias primas, de recursos básicos más relacionados con los aranceles serán los más perjudicados como puede ser el caso de Acerinox, CIE o Gestamp, pero cuando es un contagio y a la bolsa le da por bajar pocos valores se libran, ya que la guerra comercial tendría derivadas sobre el menor crecimiento global y los sectores cíclicos y financiero también se verían perjudicados.
-¿Qué recomendaría hacer en estos momentos donde la mayoría de inversores está pensando en las vacaciones?
-Confiar en las inversiones que se tienen y cubrir la cartera de cara a nuevas medidas arancelarias que pueden venir en agosto.
Juan Espinós, director de Renta 4 en València
-¿Se desencadenará una guerra comercial de calado ante los cruces de declaraciones -y aranceles- entre EE UU y China?
-Es difícil saber cómo van a reaccionar el resto de países. EE UU ha aprobado la entrada a partir del 30 de agosto de nuevos aranceles del 10% por valor de 200.000 millones de dólares a productos chinos tales como ropa, televisiones y componentes, refrigeradores y otros artículos tecnológicos excluyendo los teléfonos móviles. Recordamos que el viernes entraron en vigor los aranceles por valor de 34.000 millones de dólares (y pendientes de revisión 16.000 millones adicionales, que deberían entrar en vigor el próximo mes) a los que China de momento no ha respondido. Habrá que estar atentos a la reacción de China ya que, en caso de tomar nuevas medidas, EE UU amenaza con 200.000 millones de dólares adicionales hasta alcanzar los 400.000 millones. Dado que las importaciones de China en 2017 alcanzaron los 150.000 millones de dólares, no se descarta que busquen otras vías de presión contra las multinacionales americanas que operan en el país. Desde luego si se extiende a otros países una guerra comercial podría iniciar una desaceleración a nivel global.
-¿Cómo puede afectar sobre la bolsa española?
-En principio estos aranceles entre EE UU y China no le afectaría. De momento estas decisiones arancelarias apenas tendrían impacto para las compañías españolas. La incertidumbre se debe a que esta guerra comercial pueda extenderse a Europa y, si se diera este caso, afectaría principalmente al sector industrial en general.
-¿Qué recomendaría hacer en estos momentos donde la mayoría de inversores está pensando en las vacaciones?
-El periodo estival es un periodo corto de tiempo de dos meses. Yo tendría una visión más a largo plazo a la hora de tomar decisiones de inversión, pero desde luego tener una partida de liquidez preparada para intentar aprovechar ciertas oportunidades que pueden darse sería una buena opción.
Javier Gómez, director de Andbank en València
-¿Se desencadenará una guerra comercial de calado ante los cruces de declaraciones -y aranceles- entre EE UU y China?
-No es nuestro escenario central, ya que acabaría siendo perjudicial para ambas economías. No parece pronto para volverse muy negativos, pero sí es necesario reconocer el ruido de fondo dentro de una estrategia que creemos más de renegociación que de confrontación, pero sin solución inmediata. No podemos perder de vista el interés electoral de Trump, con elecciones de mitad de mandato para finales de año en EE UU, lo que alentará a un Trump deseoso de apuntarse un tanto en el cumplimiento de su programa de 'America First' en materia comercial. Entre tanto, volatilidad e incertidumbre nos pueden acompañar. De momento el impacto macroeconómico de lo anunciado es limitado. Algunas estimaciones apuntan a que podría detraer un 0,1% del PIB chino y añadir un 0,1% a su inflación. Pero cuantificar en términos de desaceleración y mayor inflación no es sencillo, ya que exige hipótesis como la traslación de los mayores precios al consumidor, posibles cambios de la producción, caída de la confianza del consumidor, interrupciones de la cadena de suministros… Muchas incógnitas, lo que hace que las estimaciones hayan de tomarse con prudencia.
¿Cómo puede afectar sobre la bolsa española?
-Sin ser la economía o el mercado más directamente afectado, sí nos vemos arrastrados por el sentimiento de mercado en general. Y si este empeora parece difícil imaginar a un Ibex 35 al margen de esta tendencia. Además, si las tensiones comerciales van a más no se limitarían a la relación EE UU-China sino que Trump además revisaría el marco comercial con la Unión Europea (UE), que también resultaría económicamente afectada y con ello España.
-¿Qué recomendaría hacer en estos momentos donde la mayoría de inversores está pensando en las vacaciones?
-Para los inversores de renta fija, que sigan en 'formato defensivo', en activos de corto plazo, con bajo riesgo de duración y de crédito y una posición neutral en relación con la deuda emergente. Todo ello combinado con activos de gestión alternativa y vigilando la evolución de los diferenciales de crédito por si surgieran oportunidades. En cuanto a la renta variable, comenzamos el verano en niveles medios de riesgo, con mercados desarrollados como favoritos -particularmente Europa-, y un peso tácticamente en emergentes más prudente que en momentos anteriores. Y sectorialmente también nos posicionamos de forma defensiva: con más peso en consumo cíclico y farmacéuticas y menos en tecnología americana, más expuesta a los recortes tras un extraordinario 2018 y en valoraciones ajustadas.
Sergio Serrano, director general de Gesem AV
-¿Se desencadenará una guerra comercial de calado ante los cruces de declaraciones -y aranceles- entre EE UU y China?
-La verdad que es bastante impredecible como puede terminar esta situación dado el perfil del presidente americano. La realidad es que quien va a pagar principalmente esta guerra es el consumidor estadounidense con subidas en los precios de los artículos en los que se han impuesto aranceles, por lo que no tendría mucho sentido que esta situación fuera mucho más allá de lo conocido hasta ahora. Pero como digo Donald Trump es impredecible.
-¿Cómo puede afectar sobre la bolsa española?
-Pensamos que la bolsa española debería tener un mejor comportamiento relativo al que pudieran tener el resto de bolsas europeas si la guerra comercial continúa. En el Ibex 35 tienen mucho peso compañías de servicios (banca, ocio y viajes, telecomunicaciones, medios de comunicación), utilities y sector inmobiliario, que por su propia naturaleza no son susceptibles de exportar ya que lo que servicios que prestan o productos que venden se prestan/venden en el mismo sitio que se consumen, por lo que quedan fuera de esta guerra. Por el contrario, bolsas como la alemana deberían tener un comportamiento relativo peor por el elevado peso del sector industrial y exportador (químicas, automóviles,…) en su índice Dax. En cualquier caso, aunque esperamos que la bolsa española lo haría mejor que las europeas con un agravamiento de la guerra comercial, no creemos que pudiera escapar de las pérdidas generalizadas.
-¿Qué recomendaría hacer en estos momentos donde la mayoría de inversores está pensando en las vacaciones?
-La incertidumbre por la imposición de aranceles pensamos que ha dejado a las bolsas europeas en niveles atractivos de entrada aunque es cierto que estamos viendo un ligero desaceleramiento en los últimos datos económicos conocidos. La realidad es que el mercado tiene ganas de subir en cuanto la guerra comercial nos da unos días de tregua. Nosotros no saldríamos de renta variable, ya que la posibilidad de perderse un rebote de importancia es elevada aunque mantendríamos una exposición algo más baja a lo habitual dentro del perfil de riesgo de cada uno, ya que las incertidumbres todavía son altas.