VALÈNCIA (EP). La Diputació de València abre sus puertas un año más para exhibir su belén monumental, que este año tiene una importante carga emotiva al tratarse de una obra completamente restaurada tras sufrir daños causados por la Dana del pasado 29 de octubre.
Este belén se encontraba el día de la catástrofe en los almacenes de la Asociación de Belenistas de Valencia en Alfafar, donde entró el agua causando graves destrozos a parte de su patrimonio, incluidas las piezas del belén.
"Desde ese momento hemos hecho un gran esfuerzo para restaurar el conjunto de la obra y llegar a tiempo para exponerla en la Diputació", explica el presidente de la entidad, Gonzalo Mateu, en un comunicado de la corporación provincial.
De hecho, si los visitantes están atentos, comprobarán que en una de las casas del belén, en cuya parte superior hay un palomar típico de la ciudad de València, se aprecia todavía la marca de agua que dejó la inundación.
"Queríamos mostrar una de las piezas sin restaurar para que se pueda apreciar el daño que hemos sufrido y también como símbolo de esperanza a pesar de todo el patrimonio que la asociación ha perdido en esta tragedia", señala el responsable de la Asociación de Belenistas.
El belén se puede visitar, con entrada libre, hasta el próximo 5 de enero en el patio del Palau dels Scala, sede de la institución provincial, que abre sus puertas todos los días en horario de 10 a 14 y de 16 a 20 horas, a excepción de los días 24 y 31 de diciembre y el 5 de enero que se podrá visitar solo en horario matinal.
Este año, el belén rinde un pequeño homenaje a los héroes de la Dana. En el nacimiento se han colocado unas palas como símbolo de todos los voluntarios que han ido a ayudar a los municipios afectados, mientras la figura de San José aparece con una rosa en su mano en representación de las víctimas mortales. Se trata de un homenaje a través de un símbolo que también se está utilizando en otros belenes de Valencia y de España
Como es habitual, el belén de la Diputació está salpicado de guiños y detalles que hacen referencia a las costumbres y tradiciones de varias zonas de la provincia. En la primera parte de la obra, los Reyes Magos van por la ribera de un río, que simboliza la importancia de la riqueza fluvial para varias comarcas valencianas.
El poblado situado en la parte superior pretende representar la riqueza natural de los pueblos del interior de nuestra tierra. Por su parte, la fuente junto al nacimiento hace referencia a este elemento tan típico de muchas localidades valencianas.
En la secuencia de la anunciación a los pastores se puede ver a cuatro músicos, una reivindicación del fuerte arraigo que tiene la cultura musical en la provincia. En el puesto de frutas y verduras se pueden contemplar productos muy valencianos como mandarinas, naranjas, caquis o berenjenas.
Y en la parte final se sitúa el horno de pan en el que se muestran dulces típicos como el arnadí de La Costera, la almoixàvena de Xàtiva, o el panquemao de Alberic.
Otro elemento característico de muchos municipios valencianos, en este caso de su patrimonio, es el castillo, emplazado en la parte superior de este belén.
La Diputació inicia con el belén su campaña de Navidad, que este año tiene como lema 'La luz que nunca se apaga', una llamada a iluminar Valencia y su gente en unos momentos tan duros.
Se han organizado actividades durante todas las vacaciones, como la Plaza de Navidad que abrirá el día 22 en la plaza de Manises, la oficina los Reyes Magos de Oriente desde el día 27 y eventos culturales como el circo del Escalante, los conciertos musicales en La Beneficència o los talleres de los museos de Etnologia y de Prehistòria. Además, habrá un expositor en Expojove del 26 de diciembre al 4 de enero.