VALÈNCIA (EFE). La vicepresidenta segunda de la Diputación de Valencia y diputada de Carreteras, Reme Mazzolari, ha abogado en el Comité de las Regiones de la Unión Europea por "humanizar" la red de carreteras de la corporación provincial mediante la introducción de criterios sostenibles.
La intervención de Mazzolari, ingeniera de profesión y primera mujer en dirigir área de Carreteras de la institución provincial, se enmarca en un encuentro de la CEPLI, una confederación dependiente del Comité de las Regiones de la Unión Europea que agrupa a nueve asociaciones nacionales y representa a 1.167 municipios y gobiernos locales intermedios de Europa.
A su juicio, hay que "dar un paso más en la gestión de las infraestructuras, poniendo el acento en las necesidades de las personas, e introduciendo componentes relacionados con los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), para conseguir una red de carreteras sostenible que sea una garantía para la sociedad actual y las que vengan en el futuro".
La vicepresidenta ha indicado que el objetivo es "humanizar" las carreteras de la provincia siguiendo la estrategia marcada por el presidente de la Diputación, Vicente Mompó, y ha aclarado no se trata de crear algo completamente nuevo, sino de "reorganizar los elementos existentes para mejorar las áreas de la vida cotidiana mediante proyectos de innovación social".
Como ejemplo, ha citado la digitalización de los procesos constructivos, la mejora de los parámetros medioambientales de las obras y la utilización de nuevos materiales más sostenibles y ecológicos, según un comunicado de la Diputación.
"No estamos hablando de buenas intenciones ni de proyectos por acometer, sino realidades palpables en los procesos que ya se están trabajando desde el área de Carreteras", ha asegurado, como los sistemas urbanos de drenaje sostenible incorporados a la CV-670 entre Piles y Oliva, la fase 2 de la variante de Bétera y la CV-336 entre San Antonio de Benagéber y Bétera.
También se están empleando firmes reciclados, que permiten reducir los residuos generados y las emisiones que genera su transporte a vertedero, y aplicando nuevas mezclas asfálticas para los pavimentos de las carreteras más sostenibles y eficientes, que minimizan el consumo energético durante su fabricación y puesta en obra y que aumentan su vida útil.