VALÈNCIA (EP). El director de la Agència Valenciana Antifraude (AVAF), Joan Llinares, ha defendido que la proposición de ley que ha registrado el PP para modificar la ley fundacional de la entidad recoge propuestas que había hecho el propio organismo "en muchos aspectos, por no decir la mayoría" y ha señalado que la introducción de una segunda vuelta para elegir a su sucesor por mayoría absoluta es una forma de "desbloqueo".
Así lo ha asegurado Llinares en una rueda de prensa que ha ofrecido tras presentar la memoria de Antifraude de 2023 en Les Corts, donde ha considerado que es "ideal" elegir a la persona que le suceda en el cargo --que dejará el 25 de mayo de este año-- por mayoría cualificada del parlamento (tres quintos de los diputados), pero ha señalado que aunque "le guste más" esa fórmula, no puede "cuestionar la legitimidad" de alguien elegido por mayoría absoluta.
Llinares ha señalado que la proposición de ley --que a diferencia de las otras cuatro que presentaron la semana pasada, registró el PP en solitario, sin Vox-- "no modifica el procedimiento por el cual el parlamento tiene que elegir el candidato", ni cambia "el sistema de participación e iniciativa de la sociedad civil para presentar candidaturas".
De hecho, Llinares ha señalado que la inclusión de una segunda ronda para elegir al director por mayoría absoluta está "prevista en otras normas nacionales y estatales". Sí ha justificado que la mayoría de tres quintos a él le ha dotado de una "legitimidad" junto a su equipo directivo, que espera que suponga la "continuidad" de la agencia.
Sin embargo, no puede "decir que no" a lo que considera una "forma de desbloqueo de las instituciones" y ha resaltado que tampoco le parece bien que "una persona se perpetúe en un lugar cuando la ley dice que el tiempo que tiene que estar al frente es el que es". De hecho, ha indicado que la propia agencia ya propuso esta idea en 2021.
Preguntándose si puede ser que una persona elegida en segunda ronda sea no idonea, ha destacado que por mayoría cualificada también pueden elegirse personas que no lo son y ha puesto como ejemplo al exdirector de la Oficina Antifrau de Catalunya, Daniel de Alfonso, que fue elegido por mayoría cualificada y fue cesado tras conocerse sus conspiraciones con el ministro del PP Jorge Fernández Díaz. Para el director, "el tiempo dirá si la fórmula es idónea o no lo es".
Para el director, lo importante de esta proposición de modificación es que gracias a ella, "la Agència se consagra como una institución admitida y aceptada por todas las formaciones políticas" y su futuro dependerá "del buen hacer del director y de los funcionarios".
"Durante siete años hemos tenido que vivir con el sambenito de que 'cuando vengan los otros os van a suprimir'", ha manifestado. "Esta obsesión de que es un invento y un chiringuito se ha acabado", ha agregado.
Llinares ha destacado que se respetan en la norma varias peticiones de la agencia, como la consideración de los servicios especiales de los funcionarios, la definición de qué es lo que se considera corrupción y que se tenga en cuenta el tiempo trabajado en la agencia a efectos de carrera profesional.
Respecto a la modificación del sueldo del director, Llinares ha matizado que se refiere a la persona que le suceda y que se ha incorporado para que "aceptar este puesto no le tenga que sifniciar una pérdida de las retribuciones que ya ha ganado en su carrera funcionarial".
De hecho, ha señalado que él en su caso ya tuvo que perder remuneración por su puesto, aunque lo hizo porque consideraba que era "fundamental" la puesta en marcha de este organismo, pero remarca que esto "no se le puede exigir a todo el mundo". "Es algo tan irracional que el director de una Agencia Anticorrupción cobre menos que 15 funcionarios de la entidad", ha manifestado.