Educación obliga a Sollana a retomar las clases: el municipio prefería retrasar la vuelta hasta el día 11 

VALÈNCIA. Este jueves la localidad de Sollana, en la Ribera Baixa, no solo ha amanecido cerrada perimetralmente, también con las clases del CEIP López Marco y del instituto suspendidas. El municipio, que ha sido uno de los 29 confinados por el Consell debido al incremento de los contagios en las últimas semanas, presenta una incidencia acumulada de 1.446 y ha registrado 70 positivos en los últimos 14 días.

Ante este escenario, el alcalde Vicente Codoñer, decidió el pasado miércoles retrasar el inicio de las clases previsto para el día 7 de enero, hasta el día 11. Una decisión que iba contra el criterio de la conselleria de Educación y la de Sanidad, quienes han apostado por iniciar las clases este mismo jueves. Además de la pandemia, desde el ayuntamiento también han apuntado a la situación meteorológica prevista para los próximos días como motivo para la suspensión de las clases. El servicio de emergencias, sin embargo, tiñe esta localidad de color verde, ya que se trata de un territorio "sin riesgos".

El retraso de la vuelta a las clases, no obstante, ha durado poco. Este mismo jueves la conselleria de Educación se ha puesto en contacto con los centros escolares y les ha instado a que retomen las clases de manera inmediata, es decir, este viernes. "Acatamos la decisión, pero no la compartimos", asegura el primer edil popular. "No entendemos como ante una situación epidemiológica y meteorológica como la que tenemos se tengan que desplazar los alumnos al colegio, no tiene demasiado sentido. Han tomado una decisión, para nosotros, equivocada", critica.

Además, desde la administración local insisten en la cancelación de la actividad lectiva durante dos días fue "hablada y consensuada". Según Codoñer, lo consultaron y acordaron con los facultativos del centro de salud de la localidad, con los directores y con las AMPAS de ambos centros. "Todos coincidimos en lo mismo, solo eran un par de días y aquí ha estado todo el día lloviendo y la temperatura en las aulas no supera los siete grados. No son las mejores condiciones sanitarias para reabrir", añade.

Sin competencias para cancelar las clases

Pese a ello, según la conselleria de Educación, el primer edil de Sollana "no tiene competencias para hacer lo que ha hecho". En este sentido, desde el departamento que dirige Vicent Marzà señalan que un alcalde solo puede suspender la actividad lectiva como responsable de la protección civil. Estas competencias le permiten interrumpir las clases por motivos de emergencia, normalmente meteorológica, "pero para eso debe existir una alerta, y en Sollana no la hay", apuntan desde la conselleria.

Aparte de los avisos de lluvias y la bajada de las temperaturas prevista para las próximas horas, el primer edil popular también hacía referencia a la situación epidemiológica. En este caso, desde Educación son claros: "Tampoco está justificado porque las competencias corresponden a Sanitat”. Así pues, recuerdan que el decreto dictado por el departamento que dirige Ana Barceló no prevé el cierre de centros escolares y que, pese a estar confinados, los profesores o el alumnado de otras localidades que asistan a los centros escolares de Sollana, pueden acceder sin problemas.

El choque entre Educación y Sollana parece resuelto y finalmente se retomarán las clases con normalidad. Eso sí, Codoñer deja entrever que algunos vecinos y vecinas de la localidad no lo harán: "La sensación general es que quien tenga que llevar a sus hijos los llevará, pero muchos otros no. Cada familia que haga lo que considere".