VALENCIA. Valencia es una ciudad amigable para el emprendimiento. Así lo apunta un estudio realizado por la Universitat Politècnica de València, enmarcado en la Cátedra Ciudad de Valencia, con la colaboraciónd e Fundación Inndea. "Análisis del emprendimiento innovador en la ciudad de Valencia: el caso de las startup que han participado en las aceleradoras" estudia el perfil de los emprendedores que pasan por los diferentes procesos en la Comunitat Valenciana.
Elises Seguí Mas y Faustino Sarrión Viñes han sido sus autores,con un trabajo de campo del Centro de Investigación en Gestión de Empresas de la universidad. La población del estudio está compuesta por 195 startups pertenecientes a Business Booster, Demium, Plug & Play, Lanzadera y Socialnest. De estas 195, se ha contado con una muestra de 104, mientras que 23 se encontraban inactivas y diez repetidas en diversas aceleradoras.
El estudio apunta a que a día de hoy más de 200 startups han sido aceleradas en Valencia, con un volumen de negocio de alrededor de 20 millones de euros, que han generado cerca de 1.000 empleos y han captado más de 25 millones en financiación. El informe destaca la creciente especialización en actividades de salud, turismo y las industrias culturales y creativas.
En términos generales, los emprendedores encuestados han recibido mayoritariamente formación sobre emprendimiento, disponen de conocimientos y experiencias para desarrollar un negocio, han lanzado su negocio para aprovechar una oportunidad, el deseo de una mayor independencia es su principal motivación subyacente, han asumido riesgos personales, principalmente de abandono del trabajo, y en consecuencia tienen un mayor miedo al fracaso.
Es curioso observar que la mitad de los emprendedores que entran en las aceleradoras estaban trabajando a tiempo completo por lo que no supone de forma mayoritaria una salida profesional para estudiantes y parados. Se trata de emprendedores que cooperan mayoritariamente con otras empresas, que no es la primera vez que emprenden
La actividad de las empresas que constituyen suelen ser pequeñas ya que mayoritariamente su cifra de negocio es menor a los 100.000 euros y el resultado es modesto, concretamente un 67% por debajo de los 25.000 euros de beneficio.
Datos que, según el informe, son lógicos, teniendo en cuenta la juventud de las startups analizadas y las inversiones que deben acometer. Un 22% factura por encima de los 25.000 euros, un dato que califican como significativa teniendo en cuenta que tan solo el 11% de los encuestados supera los tres años.
Las perspectivas que tienen estos emprendedores son optimistas ya la mitad consideran que en cinco años sus empresas contarán con más de 20 empleados. Las percepciones sobre emprender en Valencia también son positivas. Los emprendedores valoran el acceso a las infraestructuras físicas, el apoyo a los negocios de alto potencial, las normas sociales y culturales y las barreras del mercado interno.
En relación a las debilidades, la principales identificadas son la política fiscal y la burocracia, la transferencia de la I+D, el apoyo a la mujer emprendedora y los programas de la administración central. En relación a las necesidades de cambios en el entorno, según los emprendedores encuestados, se debería disponer para una mejor financiación de más talleres para inversores de capital semilla y más programas de financiación para pequeños negocios.
