El 57% de los alumnos que sufren acoso escolar lo silencian casi por completo ante sus padres

MADRID, (EP). El 57 por ciento de los alumnos madrileños que sufren acoso escolar ocultan casi por completo su situación a sus padres, mientras que solo un 14,2 por ciento admite que plantea bastante lo que le pasa y un 28,6 por ciento lo hace mucho.

Así consta en el I Informe Anual sobre Convivencia y acoso, un documento que ha sido presentado esta mañana por el consejero de Educación, Juventud y Deporte de la Comunidad de Madrid, Rafael van Grieken, y el director general de Educación Infantil, Primaria y Secundaria, Juan José Nieto.

Van Grieken ha destacado que se han puesto en marcha una serie de medidas en la región para favorecer la convivencia en las aulas como la realización de esta encuentra para medir el grado de convivencia y dimensionar el acoso escolar.

Este estudio se incluiría en el Programa de Lucha Contra el Acoso Escolar, que ha impulsado por ejemplo una unidad especializada sobre esta materia y una guía de intervención frente al acoso.

"Este informe tiene relevancia desde el punto de vista de contenido y de estudio", ha reseñado el consejero, quien ha especificado que se ha realizado sobre 93.000 estudiantes madrileños en 471 centros públicos. "Es realmente importante y relevante desde el punto de vista de la dimensión del universo de encuestados dirigidos", ha señalado.

Según las cifras, la Inspección Educativa contabilizó un total de 573 denuncias en el anterior curso escolar, de las que 394 fueron infundadas. Así, se detectaron 179 casos, lo que supone un incremento de 110 casos en relación con el curso anterior. Esta cifra representa un 0,01 por ciento de la población escolar. En concreto, los casos se produjeron en 133 centros públicos, 43 en concertados y 3 privados.

"La mayor parte de casos se tiene que gestionar por tutores. Lo atípico es que acabe en Inspección Educativa. Lo importante tiene que ver con la prevención y eso debe ser en cada una de las aulas. Es relevante tener herramientas que permitan a profesores tener estrategias para detectar eso casos", ha destacado el consejero y ha insistido en que hay que minimizar esos casos que pueden ser uno de cada 25 alumnos en una clase.

Además, ha señalado que el protocolo que tienen los centros se ha actualizado recientemente para detectar casos y determinar si se han tomado medidas adecuadas. "Es necesario estar sensibilizados, tener formación e información. Todo esto ayuda a la implicación de los equipos directivos y docentes de los centros. Más de 470 han querido sumarse al estudio. Están preocupados y quieren herramientas", ha indicado.

En su intervención, Nieto ha destacado que este estudio ha sido "importante" para los centros, ya que les ofrece herramientas para atajar este problema. "Queríamos parar el acoso, aunque solo hubiera un caso", ha reseñado Nieto, quien ha animado a las familias a hablar con sus hijos.

Seguidamente, ha reseñado que el documento permite detectar que hay chicos aislados y les damos pistas a los equipos directivos para organizar el aula. De hecho, ha contado que ha habido casos de directores de centros que han manifestado que no sabían lo que pasaba, agradeciendo estas pistas ofrecidas para conocer qué chicos están aislados.

En el informe se aborda el acoso social, verbal, físico y por último el ciberacoso. El mayor es el social, que supone el aislamiento de la persona víctima de esta situación y en su mayoría se produce entre chicos de la misma aula.

El informe detalla que un 94 por ciento de los alumnos manifiesta encontrar en sus centros escolares un clima social y de convivencia adecuado. Otro dato reseñable es que un 3 por ciento de los estudiantes de la región presenta indicadores de potencial acoso escolar y otros 3 por ciento de riesgo de acoso.

De ellos, un 22 por ciento reconoce que silencia el acoso en casa, un 16,5 por ciento, manifiesta que habla de ello poco y el 18,6 por ciento, que lo hace algo. Sólo un 14,2 por ciento admite que plantea bastante la situación ante sus padres y un 28,6 por ciento, que lo hace mucho.

Los mayores indicadores de potencial acoso se produce en 3º y 4º de Educación Primaria, disminuyendo en el resto de etapas. En Primaria, hay un 5 por ciento de acoso y un 4, de posible riesgo. Según el director, cuando llega a 4º de Secundaria va bajando, dado que "los chicos maduran y baja el posible acoso escolar".

Conforme a los datos, un 86 por ciento de los acosadores eran chicos y chicas de la clase de la víctima. En el caso del ciberacoso, un 90 por ciento se da entre alumnos de la misma clase, según apuntan las cifras.

Además, el 39 por ciento de los alumnos que presentan indicadores potenciales de acoso o están en riesgo no pose ningún amigo en clase y por término medio son rechazados por un 44 por ciento de sus propios compañeros.

Los estudiantes declaran que el motivo principal de la aparición de acoso escolar está relacionado en el hecho de comportarse de un modo diferente (38,7%). Un 24,8 por ciento cree que hay razones físicas, un 19 por ciento en motivos relacionados con necesidades especiales, un 7,8 por ciento con la inmigración, y un 2,1 por ciento con la homofobia.