VALÈNCIA. El Ayuntamiento de València ha aprobado el cambio de uso de un edificio que estaba destinado a residencia de tercera edad. Ahora, la nueva propuesta permite darle un uso hotelero o de apartamentos turísticos, algo que se da en pleno replanteamiento sobre la limitación o no por zonas de este tipo de viviendas.
El solar, cercano al Palau de la Música, ya estaba edificado en el número cuatro de la calle Antigua Senda Senent y tendrá nueva vida después de estar más de diez años vacío y paralizado por la falta de viabilidad del uso al que estaba destinado, motivo por el que solicitan el cambio.
Con una licencia del 26 de abril de 2005 y gestionado por la empresa Cresolamb SL, administrada por Juan Bautista Valero, se solicitó el julio de 2016 el cambio al no haberse usado nunca como residencia de la tercera edad, por lo que sus dueños vieron el uso hotelero o de apartamento turístico como idóneo para poder explotar la parcela a corto plazo.
Según fuentes de la concejalía de Urbanismo, el inmueble tiene carácter de servicio público privado por lo que se ha firmado un convenio con el propietario para que, a cambio de permitirle usarlo para apartamentos turísticos, el consistorio se quedara con los bajos para darles un uso social, 388,12 metros cuadrados, incluido altillo.
La compensación económica alternativa a la cesión de suelo dotacional que proponían desde la parte empresarial ascendía a 162.508,10 euros mientras que la superficie que ellos utilizarán será de 1.612 metros cuadrados de techo terciario.
Recientemente, un 69,10 % de los vecinos de la ciudad de València afirmaba en una encuesta realizaba en el Ayuntamiento que no les molestan los "turistas de apartamento", mientras que el 21,8% aseguraba que este tipo de inquilinos genera más molestias que los propietarios.
El Ayuntamiento realizó una serie de encuestas a "residentes de los barrios más afectados" por este fenómeno. En total, 2.585 cuestionarios durante los meses de marzo y abril de este año en un total de 40 barrios, de los que 696 encuestas corresponden a Ciutat Vella, 238 a L'Exaimple y 140 a Extramurs. Vecinos como los del barrio de Ruzafa sí que se han quejado tanto de las molestias como de la subida de precios del alojamiento.
Mientras, el consistorio también sigue en la tarea de definir cuál será la fórmula para regular los apartamentos turísticos en la ciudad, aunque desde Urbanismo señalaron que uno de los modelos era el de edificios enteros. Para ello, el consistorio está realizando un mapa con el fin de detectar si existe saturación en los diferentes barrios y poner límite a la proliferación de este tipo de alojamientos en el caso de que las zonas estén saturadas.