Elisa Valía y Carlos Espinosa.VALÈNCIA. El Ayuntamiento de València, a través de la concejalía del Ciclo Integral del Agua, y Acciona, empresa gestora de la red de saneamiento de la ciudad, inician hoy la campaña “Nuestro mar empieza aquí” para concienciar a la ciudadanía sobre el buen uso de la red de saneamiento y alertar de que los pequeños gestos del día a día contribuyen a cuidar de la salud y la calidad de nuestros ecosistemas.
En la presentación de la campaña, que se enmarca en el Día Mundial del Medio Ambiente que se celebra mañana, la concejala del Ciclo Integral del Agua, Elisa Valía, ha resaltado que “es imprescindible que la ciudadanía se implique y sea consciente del alto impacto de los pequeños gestos en el espacio público para mantener cuidada la red de saneamiento”.
En este sentido, Valía ha explicado que “en una forma muy gráfica, queremos alertar de que debajo de cada imbornal de nuestras calles y plazas se encuentra directamente el mar Mediterráneo, a través de la extensa red de alcantarillado, y que cualquier mal uso revierte en nuestro medio ambiente. Cada mascarilla, papel, colilla u otros residuos que se tiran a la vía pública acaba en nuestra red de saneamiento, produciendo y generando un perjuicio medioambiental altísimo, que nos obliga al Ayuntamiento a destinar recursos adicionales para su mantenimiento y conservación”.
La concejala ha recordado que la red de saneamiento “juega un papel crucial para la gestión de los efectos de los episodios de lluvias torrenciales o gotas frías que se han acrecentado por el cambio climático, evitando daños materiales y medioambientales. En esos momentos clave la red de alcantarillado debe responder con toda su capacidad y no puede verse condicionada por elementos que la obstruyan”.
Valía ha resaltado que “estratégicamente desde la concejalía estamos impulsando políticas que alivien la presión que sufre la red de alcantarillado de la ciudad en momentos de lluvias, desde una visión de renaturalizar el espacio público que nos ayude a infiltrar el agua en el terreno y gestionarla en origen mediante sistemas urbanos de drenaje sostenible. Y también con la construcción de otros 7 grandes depósitos de tormentas que almacenen el agua y nos permita su depuración y posterior reutilización”.
Para Valía, “cuidar la red de saneamiento no es sólo es una cuestión medioambiental sino también económica, ya que un buen uso permitiría que los recursos que ahora se destinan a esta limpieza extra de los colectores pudieran destinarse a inversiones mucho más productivas para la ciudad, que sí supusieran una mejoría en la día a día de las vecinas y vecinos de València”.
Por su parte, el responsable de Acciona en València, Carlos Espinosa, ha explicado que “aunque la red de saneamiento sea una gran desconocida para la ciudadanía por estar enterrada bajo suelo y no ser visible, es un servicio esencial para el normal desarrollo de la ciudad y la calidad de vida de las personas”.
Espinosa ha recordado que “hace tan sólo 3 años el Ayuntamiento de València tuvo que destinar más de 10 millones de euros para retirar más de 6.000 toneladas de residuos de la red de alcantarillado de la ciudad, sobre todo por la acumulación de productos no adecuados para ser tirados a la red de alcantarillado, como las toallitas higiénicas”.
Para el responsable de Acciona en València, “la ciudad hace un enorme esfuerzo presupuestario para el mantenimiento y conservación de la red de alcantarillado, que sólo el año pasado ascendieron a casi 5 millones de euros, además de las inversiones en la propia red consistentes en la mejora de las prestaciones y aumento de sus capacidades”. Por ello, ha apuntado que “es vital hacer partícipe a toda la ciudadanía en el buen uso y el cuidado de los servicios públicos, como el del saneamiento, con la vista puesta en la protección medioambiental”.
Acciona gestiona desde 1996 el servicio de explotación limpieza y conservación del Sistema Municipal de Saneamiento de la Ciudad de Valencia y garantiza el funcionamiento de la red de saneamiento y de todas las instalaciones asociadas, como son las estaciones de bombeo de aguas residuales y pluviales, las estaciones depuradoras de aguas residuales, los bombeos de pasos inferiores, las compuertas de derivación, entre otras.
