VALÈNCIA. (EFE) El Ayuntamiento de València ha solicitado una nueva asignación de agua del Júcar para La Albufera en el marco del Plan Especial del lago, un documento de consenso entre administraciones en el que se establece "la hoja de ruta para conseguir el potencial ecológico de La Albufera y su recuperación ambiental".
Según un comunicado del Ayuntamiento, el concejal de Devesa-Albufera, Sergi Campillo, ha participado este miércoles en la reunión del Plan Especial de La Albufera, en la que ha manifestado que el proyecto "marcará el futuro del parque natural para que llegue a buen puerto".
Las tres administraciones implicadas (Ayuntamiento, Generalitat y Confederación Hidrográfica del Júcar) tienen que dar el visto bueno al Plan Especial de La Albufera en septiembre y, entonces, empezar la ronda de consultas con las entidades y resto de administraciones locales representadas en la Junta Rectora.
Por lo tanto, el Plan Especial, si bien tiene que ser consensuado primero entre las tres administraciones, después tiene que someterse a la evaluación de la Junta Rectora del Parque Natural.
Actualmente, La Albufera es un sistema con exceso de nutrientes que provoca una explosión de microalgas en suspensión, por tanto, el objetivo es tener una laguna de aguas cristalinas, con pocas algas en suspensión y mucha vegetación subaquàtica desarrollada.
"Este es un objetivo irrenunciable para el Ayuntamiento de València: que La Albufera vuelva a ser un lago lleno de vida, con plantas sumergidas y una diversidad animal enorme, como antes del colapso ambiental de los años 70", ha destacado Campillo.
Esta asignación de agua del río Júcar, según un estudio del Servicio Devesa-Albufera, no tendría que ser inferior a los 70 hm³ anuales y, además, tendrían que estar distribuidos a lo largo del año hidrológico, para compensar cuando no hay cultivo de arroz y no entra agua al sistema.
Además, Campillo se ha referido en la reunión a la necesidad de acabar las obras de saneamiento pendientes, y especialmente la conexión de los tanques de chubascos al colector oeste, que evita la entrada de agua muy sucia en época de lluvias torrenciales.
Ha asegurado que "hace falta un plan global de aprovechamiento de las aguas tratadas por las depuradoras, porque no podemos estar tirando esta agua al mar si tenemos restricciones de uso de agua de los ríos, y más en un escenario de cambio climático. De esta forma, podríamos liberar recursos de los ríos Júcar y Túria que podrían llegar al Parque Natural de L’Albufera".
El concejal ha trasladado su satisfacción porque, "por primera vez, la Confederación contempla una asignación directa de agua al lago en el próximo plan hidrológico que empieza en 2021. Pero en los últimos años estamos viendo que cuando entra agua del río Júcar de manera directa en L’Albufera, hay una proliferación de vegetación sumergida, como hacía décadas que no se veía en el lago".
"Y éste es un indicador de que el sistema se regenera. Si desde la Confederación se incrementa la dotación hídrica con agua de calidad y en cantidad del río Júcar, se verá enseguida una respuesta muy positiva del lago de L’Albufera", ha añadido el regidor.