Ramón Vilar, concejal de Hacienda de Valencia. Foto: EVA MÁÑEZVALENCIA. La Concejalía de Hacienda ya ha trazado su hoja de ruta para suavizar el incremento del Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI) vigente desde el presente ejercicio, tal y como reclama la patronal del pequeño comercio Cecoval. El escenario al que está dispuesto a llegar el concejal del ramo, Ramón Vilar, consiste en que la subida del tributo sólo afecte a los 200 comercios de la ciudad que tengan el valor catastral más alto.
Los cambios en el impuesto realizados por el Ayuntamiento de Joan Ribó gravan el IBI de los espacios comerciales con un valor catastral de más de 250.000 euros, una cifra que, según Cecoval, extiende la subida a buena parte de comercios que se encuentran en el centro de Valencia -tanto si son propietarios como del inmueble como si no, ya que en ocasiones los dueños repercuten el cambio en el gravamen al inquilino-.
Con el objetivo de paliar esta circunstancia, la patronal del pequeño comercio propuso elevar el umbral al menos hasta 300.000 euros, un cambio que reduciría de forma significativa el número de pequeños comercios afectados por la subida.
La Concejalía de Hacienda, como informó este diario, se mostró entonces partidaria de acometer un ajuste para satisfacer a los pequeños comerciantes. Vilar, al respecto, si bien no concreta todavía qué valor catastral tomaría como referencia para comenzar a aplicar la subida del IBI a los comercios, apunta que el consistorio estaría dispuesto a reducir la recaudación por este concepto "en casi de un millón de euros".
El dirigente, sin embargo, agrega que la decisión todavía no está cerrada. Resta para el acuerdo que los portavoces de las formaciones que integran el gobierno local pacten el contenido de la ordenanza.
El cambio tributario impulsado por el tripartido, como ha venido informando este diario, ha conllevado más de 150 reclamaciones por parte de grandes propietarios inmobiliarios, entre los que se encuentran nombres como El Corte Inglés, los clubes Valencia CF y Levante UD; la Inmobiliaria Guadalmedina, los propietarios de los centros comerciales Aqua y Arena Multiespacio, el Real Club Náutico de Valencia o la Sociedad de Garantía Recíproca (SGR).
