La nueva secretaria autonómica de Economía, Blanca Marín (PSPV), no puede nombrar al asesor que le corresponde mientras no se formalice la salida del actual jefe de gabinete del conseller
VALENCIA. La segunda ronda de cambios en la Conselleria de Economía, la más agitada en el primer año de funcionamiento del Consell del Botànic, está pendiente de un nombre: Rafa Carbonell. La salida del jefe de gabinete del conseller Rafael Climent (Compromís), anunciada tres meses antes de que se concretase la batería de ceses y nombramientos en el segundo y tercer escalón de este departamento, es la pieza que resta por encajar para desencadenar el futuro baile de asesores.
La Conselleria de Economía cuenta actualmente con cuatro asesores que ocupan puestos de personal eventual. Se trata, al margen del mencionado jefe de gabinete del conseller, de Josep Lluís Jordà (asesor parlamentario con una retribución de 44.069,48 euros anuales); Marina Cerdà (asesora de asuntos generales, 44.069,48 euros al año); e Ignasi Lara (asesor de prensa, 44.069,48 euros anuales).
Todos ellos fueron nombrados a propuesta del conseller a pesar de que en el reparto de asesores previsto en el Consell del mestizaje se preveían tres asesores para el conseller y uno para el secretario autonómico. La excepción en el caso de Economía vino porque la exnúmero dos, María José Mira, renunció al asesor que le correspondía designar a cambio de que el PSPV pudiera disponer de una dirección general más que fue para Juan Ángel Poyatos, responsable de Planificación y Servicios del Servef.
Con la reorganización de altos cargos y el nombramiento de Eva María Hernández para sustituir a Poyatos en el Servef a propuesta de Compromís, el PSPV recupera su plaza de asesor. La designación corresponde a la nueva secretaria autonómica de Economía, Blanca Marín.
Tanto este nombramiento como el del nuevo jefe de gabinete del conseller dependen de la renuncia de Carbonell. Tal y como reconocía el conseller Rafael Climent en una reciente entrevista en Valencia Plaza, ya tiene pensado quien quiere que sea su mano derecha en la Conselleria y es "de la casa", pero el cambio no puede formalizarse hasta que se vaya el actual.
La salida de Carbonell está prevista desde mayo, cuando fue elegido portavoz del Bloc tras el acuerdo con Àgueda Micó. El motivo son las condiciones de incompatibilidad aprobadas en el cónclave del Bloc, que impiden compaginar un cargo institucional con un puesto orgánico en la cúpula.
Según las tablas retributivas de personal eventual al servicio del Consell, el salario actual de Carbonell se eleva a 49.056,56 euros anuales, una cantidad que apunta a ser superior a la que ingrese por su nueva responsabilidad en el partido.
Desde el entorno del conseller se da por hecho que el Climent cubrirá la vacante con un movimiento interno y que el sustituto de Carbonell será precisamente Josep Lluís Jordà. Con ello, Compromís pasaría de cuatro a tres asesores y se liberaría el puesto de asesor que le corresponde nombrar al PSPV, con lo que Blanca Marín ya tendría vía libre para elegir a su personal de confianza.