MADRID (EFE). El gobernador del Banco de España, Pablo Hernández de Cos, ha reconocido que en el área del euro se está produciendo una desaceleración mayor de la esperada, pero ha asegurado que ahora no ve riesgos de una recesión en esta región "ni mucho menos en España".
En una entrevista concedida a El País y recogida por Efe, también ha hecho referencia a la situación política que vive España, y ha manifestado que su preocupación es que este hecho acabe ralentizando las decisiones de política económica que hay que tomar.
"Tenemos la sensación de que la fragmentación parlamentaria algún efecto ya ha tenido. No se ha reducido nada el déficit estructural en los últimos cuatro años", ha advertido el gobernador.
"Mi miedo es que la inestabilidad política impida los consensos necesarios para seguir haciendo reformas", ha añadido Fernández de Cos, que preguntado por la crisis financiera y bancaria que ha vivido España, ha asegurado que ante este hecho "es imposible que el supervisor quede inmune en su reputación".
"Ahora debemos tratar de revertirlo y cambiar la opinión que puedan tener los ciudadanos sobre nosotros y hacerlo mejor", ha añadido.
En este sentido, y sobre el problema de reputación que sufre la banca, ha dicho que "sin duda es importante y preocupante", y que los bancos son conscientes de ello, por lo que les ha pedido más en la transparencia con el cliente.
Preguntado también sobre la relación entre el excomisario Villarejo y el expresidente del BBVA Francisco González, ha pedido a la entidad que haga un análisis en profundidad, y con rapidez, para solucionar este tema cuanto antes y así reducir al máximo el efecto reputacional.
Por último, el gobernador ha hecho referencia a las mayores exigencias de capital de la banca y ha dicho que en este asunto "no cabe ninguna relajación".