VALÈNCIA. Trenitalia, socio de Air Nostrum en el consorcio Ilsa para entrar a competir con Renfe como operadores del Alta Velocidad en España, aspira a un crédito de 550 millones del Banco Central Europeo para financiar la adquisición de varios 34 trenes. La operación financiera está en evaluación, pero la entidad valora el impacto ambiental positivo de la inversión porque promueve el cambio modal de la carretera y el avión al transporte ferroviario y sostenible en consonancia con los objetivos de la Unión Europea.
De esos 34 trenes, veinte serán operados por Ilsa en España en bajo arrendamiento de Trenitalia en las líneas Madrid–Barcelona, Madrid–Sevilla/Málaga y Madrid– Valencia/Alicante en virtud de un acuerdo marco de 10 años tras la reciente liberalización del transporte comercial de viajeros en España.
Ilsa comenzará sus operaciones en el segundo semestre de 2022 con una flota de trenes que, según la empresa, posee una eficiencia operativa inigualable por su aerodinámica de última generación, su uso de tecnologías de ahorro de energía y sus altas prestaciones, que además está compuesta en un 95% por materiales reciclables. en 2022.
La compañía, que precisamente este jueves presenta su marca y sus trenes en Madrid, incide en la sostenibilidad de su propuesta porque se trata del primer tren de alta velocidad del mundo que ha obtenido una Declaración Ambiental de Producto (EDP) con información cuantificada y verificable sobre su impacto ambiental, de 28 gramos de CO2 por pasajero y kilómetro.
Los servicios comerciales que prestarán los trenes que Trenitalia financiará con el crédito del BEI, que aportará 550 millones de los 1.238 millones que invertirá en total, pertenecen mayoritariamente en la Red Transeuropea de Transporte (RTE-T). Los catorce nuevos trenes previstos para Italia ampliarán los servicios de alta velocidad operados por Trenitalia en acceso abierto en la red de alta velocidad.
El proyecto, según destaca el BEI, apoya la expansión de los mercados ferroviarios de alta velocidad en España e Italia tras su liberalización. Además, destaca la contribución del transporte ferroviario a la lucha contra el cambio climático, por lo que la propuesta de Trenitalia "contará para la meta de acción climática" del BEI.
A favor de la empresa juega también que algunas de las líneas en las que operarán los trenes están ubicadas en regiones de cohesión y transición, como la Comunitat Valenciana y Andalucía, en España, y Campania, en Italia).
"El proyecto permitirá formas de transporte y conectividad inteligentes, sostenibles y seguras –conexiones físicas y digitales– que son necesarias para respaldar las prioridades de una Europa equilibrada y regiones funcionales", incide el banco.
Los trenes que Ilsa utilizará como primer operador privado español de AVE, han sido fabricados por Hitachi Rail en colaboración con Bombardier Transportation (ahora grupo Alstom) entre la fábrica de Hitachi Rail en Pistoia (Italia) y la de Alstom en Trápaga (Vizcaya).
El ETR1000, conocido comercialmente como Frecciarossa 1000, es un tren interoperable en distintos países europeos, mide 200 metros de largo y tiene capacidad hasta 467 pasajeros, además de ser capaz de alcanzar velocidades comerciales de hasta 360 kilómetros por hora. Es un tren totalmente eléctrico y la energía es renovable 100% por contrato con Adif.
Según Ilsa, su interior diseñado brinda a los pasajeros el mayor confort posible: pasillos anchos, asientos ergonómicos y con espacio extra, aislamiento del ruido y de la vibración y capacidad para brindar conectividad de última generación 5G.
La flota de última generación de Ilsa, nacida en Italia, recibirá un servicio de mantenimiento completo en Madrid por parte de un nuevo equipo que contará con cerca de 75 empleados en virtud del acuerdo suscrito para ello con Hitachi Rail.
El BEI considera que el proyecto tendrá un impacto ambiental positivo al contribuir al cambio modal del transporte por carretera y aéreo al ferrocarril y durante la evaluación del crédito evaluará las disposiciones para la sustitución o el desmantelamiento del antiguo material rodante de la empresa.