MADRID (EP). El PSOE repite en cabeza en las encuestas de intención de voto del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS), con una estimación de voto del 30,5%, seis décimas por encima de la anterior encuesta y sacando una ventaja de 9,7 puntos al PP, que se estrena con Pablo Casado al frente y apenas cuatro décimas por encima del dato cosechado en julio tras la dimisión de Mariano Rajoy.
La tercera posición sigue siendo para Ciudadanos, con un respaldo calculado del 19,6%, ocho décimas por debajo de su dato de julio, y la cuarta plaza es para Unidos Podemos, que suma un 16,1% con todas sus confluencias.
La encuesta se basa en 2.972 entrevistas personales realizadas en los once primeros días de septiembre, cuando se publicaban informaciones sobre supuestas irregularidades en el máster de Carmen Montón, que acabó dimitiendo como ministra de Sanidad ese día 11.
El PSOE es el partido con mayor intención directa de voto, pues un 18,6% de los electores ya tienen decidido apoyarle si mañana fueran las elecciones, por delante del 12,9% del PP, el 12,3% de Ciudadanos y el 9,8% que suma Unidos Podemos. Ante esa pregunta directa, hay un 11,7% que anuncia abstención, un 19,9% que aún no sabe a quién votar y un 2,8% que evita responder.
Sumando el voto directo y la simpatía que generan los distintos partidos, el PSOE también aparece como el primer partido en la encuesta de septiembre, con un 22,4% frente al 15,2% del PP, el 14,4% de Ciudadanos y el 11,8% de Unidos Podemos.
En conjunto, el CIS otorga al PSOE una estimación de voto del 30,5%, lo que supone seis décimas más que antes del verano y su mejor dato desde julio de 2011, cuando gobernaba José Luis Rodríguez Zapatero y el bipartidismo era hegemónico. Son casi ocho puntos por encima del resultado de las últimas elecciones generales.
Ello hace que la ventaja sobre el PP se amplíe a 9,7 puntos, aunque los 'populares' sacan un 20,8% y mejoran en cuatro décimas el dato con el que se despidió la etapa de Mariano Rajoy. Aún así, son casi 12 puntos menos que el resultado que obtuvo en las generales de 2016 y que le permitió gobernar.
En tercera posición y a sólo 1,2 puntos del PP se sitúa Ciudadanos, que con un respaldo estimado del 19,6% pierde ocho décimas respecto a julio aunque sigue estando por encima del 13,1% que logró en las generales de 2016.
Unidos Podemos y sus confluencias repiten en cuarto lugar sumando una estimación de voto del 16,1%, cinco puntos por debajo de las generales pero cinco décimas más que el pasado mes de julio. Ese reportaje se reparte entre En Marea (1,1%), la coalición valenciana de Compromís, Podemos e IU (1,9%), Catalunya En Comú (2,6%) y Unidos Podemos, que engloba a IU y Equo, entre otros (10,5%).
En conjunto, el Gobierno socialista de Pedro Sánchez es bien visto por un 15,1% frente a un 34,9% que descalifica su actuación. Esta vez ya no se pregunta por la labor de oposición, sino que se pregunta si lo haría mejor otro partido, y ninguno supera al PSOE. Así, un 48,5% cree que un Gobierno de Unidos Podemos sería peor, un 41,7% recela del PP y un 36,6% opina que también Ciudadanos lo haría peor.
Por otro lado, y por primera vez, el CIS otorga una estimación de voto al Partido contra el Maltrato Animal (PACMA), con un 1,6%, y a VOX, que saca un 1,4%.
En cuanto a las formaciones soberanistas, ERC sube al 4,1% superando de nuevo al PDeCAT, que se queda en el 1,9%, mientras que a Bildu se le calcula un 1,1% y al PNV un 0,9%.
Respecto a la valoración de líderes, el presidente Pedro Sánchez se mantiene en cabeza mejorando su nota media hasta los 4,11 puntos y superando a Albert Rivera, de Ciudadanos, que sube al 3,93, y a Alberto Garzón, de Izquierda Unida, que cae al 3,79.
Casado se estrena con una calificación de 3,56, más de medio punto por encima de la nota con la que se despidió Mariano Rajoy, mientras que cierra la tabla Pablo Iglesias, secretario general de Podemos, con 3,07 puntos.
Por otro lado, casi el 70% de los españoles considera necesario reformar la Constitución de 1978 y de ellos, cerca de la mitad, aboga por una "reforma importante" de la ley de leyes que cumplirá 40 años el próximo mes de diciembre, según se desprende del Barómetro del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS) correspondiente a este mes de septiembre.
En concreto, el 69,6% de los consultados defiende la necesidad de acometer esa reforma, frente a un 15% que considera que no hay que tocarla. Entre los partidarios de hacer cambios, el 49,3% es partidario de una modificación "importante" del texto constitucional, un 32% prefiere una "pequeña reforma" y sólo el 14% reclama "una reforma casi total".
Además, de entre quienes piden reformarla en mayor o menor grado, son mayoría (32,4%) los que defienden modificarla para lograr una mejor coordinación de competencias en educación y sanidad, seguidos de los que piden aprovechar la reforma para incrementar la transparencia y el control de la actividad política (28,9%).