VALÈNCIA. Que la situación del personal laboral del departamento de La Ribera iba a terminar en un tenso reproche se veía venir. La no negociación del convenio colectivo con la Conselleria de Sanidad o el retraso en el cobro de incentivos provocaron que este martes el comité de empresa manifestara su malestar con el departamento de Ana Barceló.
Lo hicieron en una rueda de prensa que realizaron fuera del hospital al no permitirles la gerencia, según explicaron, acometerla en el centro. El representante del Simap, Pedro Durán, explicó la situación 15 meses de los trabajadores heredados de Ribera Salud 15 meses después de recuperar el departamento de Alzira para la gestión pública. "Falta interlocución", insistía.
De hecho, aseguraba que hay cargos en el departamento de Barceló que tienen interés en que no cuaje la situación. "Hay manos negras en la conselleria que quieren que fracase porque después vienen otras concesiones", apuntaba sobre la reversión. "Fuimos todos grandes colaboradores de que la transición saliera bien", lamentaba. De hecho, aseguraba que son ya varios los procesos que tienen judicializados, como el incremento del 2,25% del salario que han subido a los estatutarios y a ellos no.
Pero la gota que ha colmado el vaso ha sido la suspensión de la negociación del convenio colectivo que, como lleva recordando Valencia Plaza, finalizó en septiembre. Aunque atribuyeron el primer receso a la celebración de elecciones autonómicas, no han vuelto a retomarse las conversaciones a pesar de solicitarlo el comité de empresa en varias ocasiones y por escrito.
Durán insistía en varios incumplimientos que no están pudiendo renegociar, como la movilidad interna, la formación, los traslados y la jubilación parcial y que en ningún caso les han solucionado, sino que les han emplazado a la negociación del nuevo convenio. "Hemos tenido paciencia y hemos perdido derechos, solo vemos la vía judicial", aseguraba. "Nos emplazaban a la negociación pero no solo se han tenido dos reuniones", apuntaba.
Los trabajadores apuntaban a una "falta de empatía" por parte de la conselleria y de obviar que el comité de empresa "está al nivel de la mesa sectorial". Incluso aseguraban que profesionales del centro han decidido marcharse "porque no se puede promocionar". Los trabajadores consideran que su situación actual es una primera fase y piensan en una segunda con una estatutarización colectiva "porque el plan de Recursos Humanos lo permite". Además, emplazaban a sus compañeros en el departamento de Dénia que no se dejaran engañar realizando la recuperación como trabajadores de una empresa pública.
