VALÈNCIA. (EFE) El conseller de Hacienda y Modelo Económico, Vicent Soler, ha manifestado que el estudio de la AIReF (Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal) presentado este jueves, en el que se indica que el déficit de la Comunitat puede aumentar al final de 2020 hasta 2,6 puntos, "pone de manifiesto la necesidad de reformar el sistema de financiación autonómica con criterios de suficiencia y equidad para afrontar la caída de ingresos derivada de la covid-19 que se producirá a partir de 2021".
La AIReF estima que el impacto de la crisis actual en las comunidades autónomas se aplazará al ejercicio siguiente, ya que los principales ingresos autonómicos de régimen común, derivados del Sistema de Financiación Autonómica, se han abonado en 2020 sin tener en cuenta los efectos de la crisis, han informado fuentes de la Generalitat
Las entregas a cuenta recibidas en 2020 no han incorporado el impacto negativo esperado en los ingresos tributarios como consecuencia de la pandemia, según señala la AIReF en su informe, pero estos efectos sí se dejarán notar en 2021 y los años siguientes, con unas caídas previstas entre el 9 % y el 13 % respecto a las cantidades abonadas en 2020.
"Mientras no tengamos un nuevo modelo de financiación autonómica más justo y solidario, la Comunitat Valenciana no cuenta con un nivel de recursos similar al de otros territorios para hacer frente a los gastos en servicios públicos fundamentales, y esta situación empeora ahora que tenemos que hacer frente a las consecuencias de una pandemia", ha indicado Vicent Soler.
La AIReF estima en su informe que el impacto de la covid-19 sobre las cuentas de la Comunitat Valenciana supondrá un aumento del déficit entre 1,8 y 2,2 puntos, dependiendo de la evolución de la pandemia.
"La Generalitat ha destinado una importante cantidad a la adquisición de material sanitario y equipos de protección, porque entendemos que la salud de la personas es lo primero. Asimismo, desde el Consell hemos adoptado medidas para hacer frente a la crisis económica derivada de la covid-19, algunas de ellas pioneras, como la de complementar la ayuda del Estado a los ERTE, y los incentivos fiscales a empresas", ha indicado Soler.
El conseller de Hacienda ha manifestado asimismo que hay que tener en cuenta "la importancia del fondo europeo de reconstrucción que deberá aprobar la Comisión Europea este fin de semana y en el que confiamos para poder hacer frente a la recuperación económica", ha señalado Soler.
En total, teniendo en cuenta los gastos adicionales derivados de la pandemia, la Comunitat Valenciana podría alcanzar en 2020 un déficit entre el -2,1 % y el -2,6 % del PIB. Este resultado se derivaría de un crecimiento de los gastos sobre el nivel de 2019 entre el 8 % y el 10 % con aumentos superiores en los gastos corrientes asociados a la COVID-19, especialmente sanitarios.
La AIReF estima que la Comunitat Valenciana experimentará un mayor gasto sanitario por impacto de la covid-19 que se situará entre 6 y 8 décimas de PIB autonómico. Se trataría de gastos de naturaleza corriente principalmente, con especial peso de los consumos intermedios y la remuneración de asalariados.
La Comunitat Valenciana también ha adoptado medidas de gasto orientadas a la promoción económica, ayudas a empresas, subvenciones extraordinarias para autónomos y otros afectados por el estado de alarma y ayudas a las entidades locales para contratar a desempleados por la covid-19.
La AIReF también detecta una mayor gasto de carácter social en subvenciones, por el suplemento de la Renta Valenciana de Inclusión, por las inversiones en centros de educación y escuelas infantiles y por adquisición de material protector y de equipos y servicios para teletrabajo. La valoración conjunta de estas medidas, según el informe del organismo, alcanzaría las 4 décimas de PIB.