El eterno retorno de Martín Varsavsky

VALENCIA. "Hace 20 años que vine a España de vacaciones y me quedé", dice, pero lo cierto es que se quedó a medias porque Martin Varsavsky, argentino de nacimiento y español por elección, es global, como Jazztel, Ya.com, Fon o Prelude Fertility, su último proyecto empresarial que presentó, "casi en primicia", la semana pasada en el Campus de Google en Madrid.

"Me enamoré de España porque me parecía un país donde se podía trabajar. Había mucho por hacer además de que, cuando dejabas de trabajar, la vida era mejor. Me gusta disfrutar de mi esposa y de mis hijos, de mis amigos, montar en bicicleta, pasar los fines de semana en la sierra...y esto en Estados Unidos no lo puedo hacer. La gente no deja de trabajar nunca".

No le gustará, pero sus viajes a Estados Unidos son más que frecuentes, aunque sean por interés. "Nunca he conseguido dinero en España. Aquí hay emprendedores muy valiosos pero no hay inversores locos que se atrevan a apostar por ellos. Esos visionarios locos sólo los encuentro fuera, en Silicon Valley". Bueno, también en Londres y Alemania ha hallado alguno.

Consecuencia de esa captación de capital fuera de España es que proyectos que nacen aquí terminan siendo el último mercado en el que penetran. Este es el caso de Fon, la compañía con la que Martin Varsavsky consiguió atraer la primera inversión de Google en Europa. La idea de Fon era crear una Red Global de WiFi. El sistema, ya presente en 18 millones de hogares de todo el mundo, es ahora cuando irrumpe en España. "Lo hicimos aquí y ha sido casi el último país que se apuntó a Fon como consumidor del producto. Ahora, finalmente, ya tenemos casi un millón de usuarios españoles".

DAVID CONTRA GOLIAT

Pero en la carrera empresarial de Martín Varsavsky, a Fon le precedieron otros aciertos. Tal vez sea Jazztel la iniciativa más conocida que fundó en 1997, dos años después de llegar a España, como el primer proveedor alternativo de acceso local en la península ibérica, con sede social en Londres. Y Aunque actualmente esté desvinculado del todo de la gestión de la compañía de aquella época recuerda su esfuerzo como educador en nuevas tecnologías y precursor de vías alternativas. "Salimos para competir con Telefónica y había que explicar al público que había otras opciones. Además, entonces España estaba en alza y nosotros llegábamos al mercado con una propuesta de ahorro que no interesaba a nadie, así que Jazztel atravesó su primera crisis".De aquellos tiempos parece conservar también cierta simpatía por algunos de los proyectos más controvertidos en la actualidad. Hablamos de Uber o Airbnb que, en su opinión, pueden convivir pacíficamente con las propuestas tradicionales. "Efectivamente hay muchas veces que uno quiere hacer algo innovador y resulta que es ilegal. A mí la idea de Uber me parece genial y no creo que quite trabajo a los taxistas como tampoco está demostrado que la gente deje de ir a los hoteles desde que surgió Airbnb. Yo uso mucho Uber y creo que España está aplicando una política especialmente retrógrada".

"Hay muchas veces que uno quiere hacer algo innovador y resulta que es ilegal"

Dirigiendo todavía Jazztel, creo Ya.com que sería la marca de internet de la primera. "Lo hice porque me parecía obvio. Era como tener la autopista y además los coches".Ya.com se convirtió y sigue siendo -ahora integrada en Orange-, empresa líder de internet en España pero ello no evitó la presentación de una demanda contra Jazztel, riña que se zanjó para siempre en los juzgados. Varsavsky se planteaba entonces en su blog: "Estos hermanos, Ya.com y Jazztel -dos empresas que surgieron de la placenta masculina de mi imaginación-, que crecieron y llegaron a tener miles de empleados y centenares de miles de clientes y usuarios, ¿por qué se pelean si el enemigo es Telefónica?". Y tal vez por despecho de padre, tal vez por pragmatismo judío, Varsavsky acabó años más tarde comprando acciones de Telefónica.

EL GRAVE PROBLEMA DEL FUTURO DE LA HUMANIDAD

Aprovechamos sus palabras referentes a la "placenta masculina" para hablar de su nuevo hijo empresarial, además de los seis que tiene de carne y hueso, y que ha bautizado con el nombre de Prelude Fertiliy. Más que un invento es un método que propone aplicar de forma sistemática las técnicas que actualmente se usan para resolver problemas de infertilidad a las personas fértiles. El objetivo: "ayudar a crear familias y solucionar uno de los problemas más serios que existen para el futuro de la humanidad".

Considerando la proliferación de nuevos modelos de familia que desean engendrar hijos y que las parejas cada vez tienen los niños más tarde con los riesgos que ello conlleva, el método divide la fertilidad en dos fases: una primera cuando, todavía jóvenes, deberíamos congelar óvulos y esperma de calidad, otra segunda cuando, ya adultos, resolvemos que estamos preparados y queremos tener hijos recurriendo a los primeros.

La segunda propuesta incluida en Prelude es secuenciar genéticamente embriones que permita a las parejas saber con antelación si ese niño viene con alguna de las más de 250 enfermedades que podemos transmitir de forma congénita. "Si una pareja joven, Pedro y María, consigue varios embriones y los estudia, van a descubrir que tal vez un tercio de ellos acarreen pérdidas o enfermedades pero los otros están todos sanos, por qué no elegir estos y quedarse embarazada de un bebé sano. No digo que tengan que hacerlo, ni decimos este sí, este no. Nosotros sólo decimos a Pedro y María que pueden tener hijos cuando estén preparados y que tienen la opción de elegir que nazcan sanos", aclaró en la presentación de Prelude.

REGRESO A SILICON VALLEY

El nuevo proyecto de Varsavsky pasa pues por la apertura de cientos de clínicas especializadas en todo el mundo. "Estas cosas o las dices a escala o nunca ocurren. Lo que yo siento es que hay muchas cosas que si no se hacen a nivel global fracasan a nivel local y que es muy importante sacar proyectos globales desde España... "y ya sé que esto es algo costosísimo y que no voy a poder levantar el dinero aquí pero hay que construir estas nuevas clínicas de fertilidad así que tendré que volver a los locos visionarios de Silicon Valley". Implicado como está plenamente en la captación de inversores, hace unos meses que dejó su puesto de CEO en Fon, "porque yo creo que un emprendedor debe estar 100% comprometido con su proyecto porque si no los inversores no me van a dar un duro y tienen razón".

Sabe también que España va a ser de nuevo uno de sus mercados más difíciles pero ahora no por la retaguardia sino por la vanguardia teniendo en cuenta que somos país líder y referente internacional en estas prácticas. Tampoco él es neófito en el campo de la biotecnología donde creó en 1986 y junto a los científicos argentinos Claudio Cuello y César Milstein (Premio Nóbel de Medicina), Medicorp Sciences, una empresa de biotecnología pionera en la realización de estudios para detectar el HIV. Así que si ya se enfrentó a Telefónica ¿por qué acobardarse ahora un hombre llamado más que a innovar a cambiar paradigmas