Arcadi Mateo cree que Crespo Gomar es "la punta del iceberg" del "modus operandi" de la empresa pública en 2007
VALÈNCIA. (EP). El exdirector general de la empresa pública Aquamed durante el periodo 2012-2016, Arcadio Mateo, ha criticado que la empresa pública se gastará 7,5 millones de euros en contratos de publicidad en 2007, precisamente en campaña electoral, dos de ellos con Crespo Gomar que, a su juicio, es "la punto del iceberg" del "modus operandi" de Aquamed en 2007.
Así se ha pronunciado en una comparecencia en la comisión de Les Corts que investiga la presunta financiación irregular del Bloc, partido mayoritario de Compromís, y el PSPV durante las campañas electorales de 2007 y 2008 y la relación con la mercantil Crespo Gomar.
Mateo, que está investigado en el 'caso Aquamed', ha explicado que cuando él llegó al cargo no se preocupó de ver qué había pasado, sino de sacar adelante una mercantil que "perdía cuatro millones al año". No obstante, ha indicado que, a petición del juez de la Audiencia Nacional Manuel García Castellón tras una declaración suya, facilitó documentación sobre los contratos publicitarios de la mercantil por "salud democrática".
"Yo no tomo una actitud activa porque estoy imputado, sino que me lo pide el juez y lo que hago es entregar la documentación. A lo mejor otros cuando llegan se ponen a levantar alfombras, pero yo no", ha remarcado para manifestar que "el PP peca un poco de ingenuo y no se preocupa de esas cosas".
Ha detallado que, en concreto, lo que entregó al juez fueron "dos contratos de un total de 47 contratos que se adjudican en 2007 con una casuística muy parecida", pero ha eludido valorar si se esta forma de operar podría ser considerada como un delito continuado. "Eso lo dirán los tribunales", ha señalado.
No obstante, sí ha puntualizado que "el modus operandi era muy parecido" y en él se repite el no superar el máximo de 211.000 euros para poder hacer un concurso "restringido" y que se presentaran "tres empresas que selecciona Aquamed" y, de ellas, se seleccionaba la que se consideraba conveniente con una evaluación técnica y por el precio.
Así, ha detallado que en los dos contratos que él ha puesto en conocimiento del juez, uno era con la desaladora de Dénia y se presentaron Crespo Gomar, una filial suya llamada Miracasa, y una tercera mercantil, precisamente las mismas mercantiles que también aspiran a llevarse el otro contrato con la desaladora de Torrevieja.
"Uno se lo lleva Miracasa y el otro Crespo Gomar. En mi pueblo esto es blanco y en botella porque son tres empresas seleccionadas: dos comunes y una de relleno. Esto mismo se repite seis o siete veces con otras empresas", ha señalado.
Al ser preguntado por el grupo de Ciudadanos por si esta fórmula se repetía a nivel nacional, el compareciente ha contestado: "Ustedes están investigando este trocito de Valencia, pero alguien ha hablado de la Gürtel del PSOE. Crespo Gomar es la punta del iceberg y un trocito", ha aseverado para afirmar que "esta operativa de Aquamed de 2007 es de ámbito nacional".
Asimismo, Mateo ha criticado que los gastos en publicidad en 2007 fueron 7,5 millones de euros, el 74% de la facturación del año cuando se ganó 10 millones; en 2008 fueron 3,8 millones, el 39%; en 2009 fue 1,4 millones, el 19% y en 2010 baja a 238.000 euros, el 1%.
"Yo no sé qué pasó en 2007, pero aseguro que Aquamed en 2011 no tuvo ese modus operandi y también hubo elecciones porque lo que no es normal es que una empresa pública se gaste el 74% de sus ingresos en publicidad en año electoral", ha señalado para incidir en que, además, tampoco es una mercantil que "tenga que gastar en publicidad" más de 100.000 euros.
Previamente, ha comparecido la extrabajadora de Crespo Gomar Alicia Bertó, quien desempeñó las labores de secretaria del gerente de la mercantil, Alberto Gomar, por la confianza que ambos mantenían y, asimismo, se encargó de temas bancarios.
Ha explicado que la empresa llegó a facturar más de 8 millones de euros anuales y se convirtió en una de las compañías de comunicación más importantes de la Comunitat gracias al trabajo realizado. En este sentido, ha negado que se pagara por trabajos no realizados y ha subrayado: "las facturas que se hacían eran por trabajos realizados".
Asimismo, ha manifestado no haber visto nada "extraño" en la empresa, sino que todo lo que se hacía era "trabajar, trabajar y trabajar" con todos sus clientes, entre los que estuvo el PSPV, ha admitido, con quienes se trabajó para la campaña electoral, pero "de manera puntual".
"No se vivía de los partidos políticos porque entonces no hubiéramos durado tantos años. Fueron trabajos puntuales y ya", ha insistido.