VALÈNCIA. La Vicepresidencia primera y Conselleria de Cultura ha dado un giro total a la relación que hasta ahora había tenido la administración autonómica con la Acadèmia Valenciana de l’Audiovisual. La clave se encuentra en una enmienda del Partido Popular y Vox a sus propios presupuestos de 2024, en los que se plantea la eliminación de la subvención directa al organismo, un montante de 260.000 euros que tenía dos objetivos: por un lado, la organización de los Premis Berlanga, en colaboración con el Institut Valencià de Cultura (IVC), y por otro el desarrollo de una oficina de internacionalización del audiovisual valenciano, gloVAL. Tal y como desveló Culturplaza este miércoles, la Acadèmia buscará otras vías para la celebración de los premios, aunque la oficina de internacionalización se desarmará.
Por su parte, desde la Conselleria de Cultura confirman que las tareas de internacionalización las asumirá la propia administración así como una redefinición del sistema de galas de premios, un sistema impulsado durante los años de gobierno del Botànic. Así, la propia enmienda contempla la creación de una nueva línea de 100.000 euros para el impulso de la “Gran Gala de las Artes Valencianas. Premio Sectores Culturales”, proyecto que sustituirá el actual, un sistema marcado por los Premis Berlanga, los de artes escénicas y los Premis Carles Santos de la Música Valenciana, que se vienen celebrando desde 2018.
La noticia ha corrido como la pólvora entre los sectores culturales, que han censurado en su mayoría esta ‘ruptura’. En primer lugar, las asociaciones de productoras audiovisuales han recibido con sorpresa tanto la noticia de la posible fusión de las galas como la pérdida de la subvención a la Acadèmia Valenciana de l'Audiovisual y critican especialmente el cese abrupto de las relaciones entre Cultura y la asociación. En este sentido, desde AVANT, creen que “romper lazos con las organización más transversal del sector, que incluye todas las profesiones del audiovisual, y también ha creado vínculos con profesionales de la Comunitat que trabajan fuera, es un error”. “Si la interlocución de Cultura es solo con productores, no será completa. Incluso las asociaciones de productores deberíamos señalar eso”, explica Rafa Molés, presidente de la asociación
Sobre la retirada del 100% de la ayuda a la Acadèmia, desde AVANT opinan que “es el primer gran hecho de cómo va a ser la política cultural del nuevo gobierno sobre el audiovisual”. Desde la asociación esperan que en futuras reuniones “expliquen cual es su plan para el audiovisual”, pero mientras tanto, “son acciones como esta las que dibujan su interés por el sector”.
Desde Productors Audiovisuals Valencians (PAV), otra asociación de productoras, son más precavidos y piden que “no se politice ni por un lado ni por otro esta situación”. “Hay que intentar que haya paz”, en palabras de Kiko Martínez, su presidente. En todo caso, afirman que lo importante es que los Premis Berlanga “tengan continuidad, más allá de quién los organice y quién los lleve adelante”. “Pelearemos por su continuidad”, zanjan. En todo caso, recuerdan que su asociación sí fue muy crítica desde el principio con el encargo de gloVAL a la Acadèmia Valenciana de l’Audiovisual, por lo que “celebran” que Cultura asuma la estructura.
Pero la posible fusión no solo afectaría al audiovisual, sino también a las otras dos galas, dedicadas a la música y a las artes escénicas. Desde AVETID (Associació Valenciana d'Empresas d'Arts Escèniques) han mostrado su “preocupación” ante el hecho de que pudiera “minimizarse o finalmente eliminarse” la entrega de premios, unas ceremonias que “suponen un gran escaparate imprescindible de los profesionales para consolidar y promocionar la producción artística valenciana”. De igual forma, ante el hecho de que se esté repensando la fórmula de galas, que podrían pasar de tres a una, desde la asociación de empresas de artes escénicas señalan que deben mantener su “propia identidad de manera individual”, siendo un “elemento de promoción del sector indispensable”.
Desde la FEVIM, Federació Valenciana de la Indústria Musical, Lluís Òscar Garcia, también cree que sería un error cambiar el modelo y caminar hacia una única gala. Siempre con las precauciones de que la Conselleria de Cultura aún no ha confirmado la máxima (aunque los presupuestos abren la puerta a que así sea), la patronal del sector de la música opina que “lo mejores la diferenciación de todas las disciplinas para que los premios reflejen todas las sensibilidades de cada arte”. En este sentido, recuerdan que los Premis Carles Santos cuentan con 18 categorías “y aún hay voces que opinan que debería diversificarse más”.
En el caso de la asociación Actors i Actrius Profesionals Valencians (AAPV), les afecta la decisión por partida doble, ya que su ámbito de actuación comprende tanto el audiovisual como las artes escénicas. En palabras de Pau Vercher, Secretario General del AAPV, “este nuevo recorte confirma el camino dudoso e incierto de las nuevas políticas culturales del gobierno de PP-Vox”. Acciones como la retirada total de la ayuda de Cultura a la Acadèmia de l’Audiovisual “perjudican gravemente el desarrollo del talento valenciano en el sector cultural y le condena a su desintegración poniendo en peligro puestos de trabajo, la dignidad y derechos laborales así como facilitar el éxodo de talento hacia otros territorios”, opinan.
El movimiento de la Conselleria de Cultura también ha tenido su eco en la oposición. Así, la concejala del Grupo Municipal Socialista Maite Ibánez ha calificado la decisión de “absolutamente sectaria” y que “no responde a otro criterio que el de censurar y cercenar la independencia del sector”. “Todo apunta a que PP y Vox está abriendo el camino para privatizar la gestión y así poder controlar un ámbito que tiene que ser libre e independiente”, ha señalado en un comunicado. “Piensan que dar una subvención es comprar el silencio de las organizaciones y las asociaciones, pero esto no funciona así”