El juzgado rechaza la suspensión cautelar del nuevo convenio de Ford Almussafes que pedía Intersindical

VALÈNCIA. El juzgado de lo Social 2 de València ha desestimado la suspensión cautelar de la inscripción en el registro del nuevo convenio colectivo de Ford Almussafes que pedía la sección sindical de STM Intersindical en Ford.

En un auto fechado este lunes, la jueza considera que el sindicato que impugnó el acta del comité empresa en la que se aprobó el el Acuerdo de Electrificación negociado por UGT para Almussafes no justifica de forma precisa ni tampoco se ha documentado el eventual perjuicio que sufrirían los trabajadores de la planta de no acordarse la suspensión cautelar del acuerdo.

Además, la jueza señala que no existe obligación del Comité de Empresa ni de la Comisión Negociadora "que exija la realización de un referéndum previo para la adopción de acuerdo alguno". A ello se une también, según alegó Ford para pedir que no se aplicara la medida reclamada por Intersindical, el vacío legal que generaría en las condiciones y el "daño irreparable en las opciones de adjudicación de los modelos de vehículos eléctricos para Ford España".

La sección sindical de STM Intersindical en Ford Almussafes exigía en su impugnación que la plantilla votase de nuevo y "con todos los rigores democráticos" el plan de ajuste salarial y laboral con el que la factoría valenciana aspira a fabricar modelos eléctricos de la multinacional y asegurar la carga de trabajo de los próximos años.

El motivo era, por un lado, la inflación y la previsible subida del IPC por encima de las estimaciones iniciales y, por otro, la "falta de transparencia total" con la que, en su opinión, se desarrolló la consulta del acuerdo organizada por UGT, a través de una aplicación y "sin garantizar el voto secreto", según denuncia el sindicato.

El preacuerdo en Almussafes consiste en un plan de ajuste para los próximos cinco años condicionado a la adjudicación de los modelos eléctricos, y contempla medidas de contención salarial y flexibilidad. En cuanto al primer punto, se trata de una "contención salarial" a cinco años que incluye aumentos salariales todos los años, pero los desvincula del IPC y no serían consolidables en tablas para toda la plantilla.

Después de negociar el plan en Colonia con la dirección europea, UGT realizó en febrero una consulta telemática a la plantilla que se saldó con un 74,95% de votos a favor del preacuerdo. Votaron un total de 4.193 trabajadores, el 70,22% de la plantilla, principalmente trabajadores afiliados a UGT y únicamente 48 no afiliados se registraron para votar. Tras la consulta, el Comité de Empresa aprobó el conocido como Acuerdo de Electrificación con los votos a favor del sindicato mayoritario.

Cabe recordar que esta brecha sindical en Almussafes había sido utilizada por los sincatos en Saarlouis como baza para intentar ganarse a los directivos de la compañia y llevarse los dos modelos que la multinacional tiene pendientes de asignar