El legado personal de Michavila pasa a ser de los valencianos

VALÈNCIA. Considerado uno de los maestros de la abstracción pictórica valenciana, fue en 2016 cuando falleció el pintor castellonense Joaquín Michavila, dejando un gran legado artístico. Pero no solo a través de su obra se puede acercar uno a la figura de Michavila, también es clave un archivo personal que ahora pasa a formar parte del patrimonio de todos los valencianos. Así, la familia Michavila Mas ha donado el archivo personal del pintor a la Diputació de València, un archivo que se compone de una treintena de cajas con documentación administrativa, correspondencia, escritos, catálogos, carteles y fotografías que completan la biografía de uno de los máximos exponentes de las vanguardias pictóricas de posguerra en España.

El legado había sido conservado en hasta ahora en el estudio que tenía el pintor en Albalat dels Tarongers, un material que pasará a formar parte del Archivo General y Fotográfico de la Diputació. Es precisamente con la administración provincial con la que le une un gran vínculo, pues el artista obtuvo en 1954 la Pensión de Pintura que la Diputación ofrecía a artistas emergentes para ampliar sus estudios en el extranjero, un programa referente del que también se beneficiaron artistas como Pinazo y Sorolla. Entre 1954 y 1960, Michavila entregó un total de 25 obras, con distintas técnicas y soportes, que forman parte del patrimonio de la institución. En el período italiano del artista se aprecian los primeros indicios de modernidad de su obra, alejándose de la tradición figurativa predominante en Valencia. A partir de 1957 se iniciaría su etapa geométrica y constructivista.

En palabras de Carmen Michavila, hija del pintor, “Italia fue la gran oportunidad que cambió la vida de mis padres, y siempre estaremos agradecidos a la Diputación por aquella oportunidad que dio a un joven artista y a su compañera de viaje”. “La donación del archivo de mi padre forma parte de ese agradecimiento eterno, con la seguridad de que su legado está en el mejor lugar posible y al alcance de los que le queremos y admiramos”, añade la también artista. Por su parte, el presidente de la corporación provincial, Toni Gaspar, ha considerado la donación “una importante incorporación al patrimonio documental de la institución sobre el contexto artístico y cultural de la Valencia de los años 50”.

Nacido en L’Alcora en 1926, fue junto a Juan Genovés y Eusebio Sempere, entre otros, que Michavila formó parte del conocido como grupo de Los Siete, que sentaría las bases de la recuperación del arte moderno de posguerra en Valencia, antes de la aparición del Grupo Parpalló del que sería miembro fundador. Durante su trayectoria, Michavila abarcó la pintura, el grabado, la escenografía, el muralismo, la ilustración de libros, la fotografía, el cine, la música, la astronomía, la crítica y el ensayo artístico; un artista multidisciplinar que fue profesor de la Escuela de Bellas Artes de València y académico y presidente de la Real Academia de Bellas Artes de San Carlos.

Durante sus décadas de trayectoria realizó numerosas exposiciones en toda España, así como en ciudades como Roma, Florencia, Basilea, Denver, Sao Paulo, Nueva York o Viena, años en los que fue ampliamente laureado, obteniendo el premio Alfons Roig en 1996, la Distinción de la Generalitat Valenciana al Mérito Cultural en 2001 o el Premio de Artes Plásticas de la Generalitat de 2007. Actualmente su obra se reparte entre distintas instituciones, entre las que se incluye el Ayuntamiento de València, el IVAM, el Museo de Bellas Artes de Valencia, la Fundación Chirivella Soriano, el Museo Contemporáneo de Vilafamés o Fundación Bancaja. También, claro, la Diputació, cuyo patrimonio ahora crece con su archivo personal.