MADRID (EP). El Massachusetts Institute of Technology (MIT) se ha fijado en BBVA para elaborar un trabajo de investigación sobre la transformación digital, abordando las características que distinguen a una empresa digital y sus líderes de otras que han quedado retrasadas en esta revolución.
"Para ser un líder digital como BBVA, la mayoría de las grandes empresas deben crear con audacia su propia visión y desarrollar las capacidades en las tres áreas de prioridad digital, plataforma de servicios conectada y coordinación digital", señala el documento titulado '¿Su empresa es un líder digital o va a la zaga?'.
El texto, firmado por el presidente e investigador senior del Sloan Center for Information System Research del MIT, Peter Weill, y la investigadora de la misma entidad Stephanie Woermer, cuenta con la colaboración del presidente de BBVA, Francisco González, y en él se identifican las prácticas de gestión de las empresas digitales líderes usando como ejemplo la transformación del 'banco azul'. Una de las principales conclusiones del estudio es que la digitalización hace que las empresas sean más ágiles y eficientes, además de más transparentes, lo que se traduce en menores costes y en una mejor oferta.
Weill, Woermer y González señalan que las principales características que definen a un líder digital son la prioridad digital, la plataforma de servicios conectada y la coordinación digital, elementos que el presidente de BBVA considera como la "piedra angular" de su desarrollo futuro.
"BBVA siempre ha sido un banco experto en tecnología, que ha realizado grandes inversiones en plataformas globales desde 2007", señala el documento, que recuerda que el grupo dedicó muchos esfuerzos en desenredar la 'madeja digital', "una maraña de procesos de negocio parcialmente digitalizados, construida a lo largo del tiempo, con muchos sistemas y versiones de datos diferentes, y la sustituyó por plataformas digitales globales, eficaces y escalables".
La investigación pone de manifiesto que la nueva estructura del banco le ha permitido evolucionar desde una entidad física tradicional "con buenas capacidades digitales" a una integrada con modelo de relación con personas y también autoservicio.
En este sentido, indica que las herramientas de banca móvil en España han resultado tan populares que los clientes que las utilizan se relacionan con el banco 150 veces al año a través del móvil, frente a cuatro veces anuales de aquellos que visitan una sucursal.