El mundo rural busca en solitario cómo revitalizarse: desde las tierras hasta la vivienda

11/01/2025 - 

VALÈNCIA. (Inma Martínez/EFE) La custodia agraria para luchar contra el abandono de tierras y establecer alquileres bajos o acceder a una vivienda a un precio simbólico a cambio de su mantenimiento constituyen algunas de las opciones para atraer población y dar vida a los pequeños municipios de interior.

Son oportunidades, en el primer caso ya en marcha, y en el segundo, una propuesta, que han observado quienes viven y trabajan en una comarca como la Canal de Navarrés, situada en las comarcas centrales de la provincia de Valencia y que reúne una población de 15.700 habitantes entre los ocho pueblos que la conforman: Enguera, Anna, Chella, Bolbaite, Navarrés, Quesa, Bicorp y Millares.

"Nunca se ha querido considerar que el espacio rural tiene que tener una atención específica y directa" por la cantidad de cuestiones pendientes y desigualdades que sufre, ha asegurado a EFE el presidente de L’Associació Institut d’Estudis Territorials el Caroig (IETEC), Pep Aparicio.

Las comarcas del interior se sienten abandonadas por las administraciones y las instituciones en cuanto a las deficientes comunicaciones, transporte y equipamiento, y potenciación de nuevos yacimientos de empleo, ya que invierten en creación de empleo "en otros territorios, urbanos, periurbanos y costeros, pero no en el interior valenciano, siempre dejado de la mano de las instituciones", dice Aparicio.

Unas cuestiones pendientes y desigualdades que redundan en el éxodo del mundo rural, especialmente de los jóvenes, con una tendencia a la baja que se intensifica desde 2008.

Pese a alguna mejora en carreteras, las poblaciones siguen necesitando un transporte público de calidad y eficiente -que no existe-, y Aparicio incide en que, cuando el Gobierno promociona viajar gratuitamente (como Renfe y el bono viaje), a los vecinos de las zonas del interior rural "les da igual".

"Pagamos con nuestros impuestos estas medidas de carácter urbano, que no se reflejan en el mundo rural, en sus desigualdades ni en, al menos, intentar resolver el transporte público diario en estos territorios", lamenta para añadir: "Cuando las políticas activas se hacen desde una perspectiva urbana, el mundo rural queda anulado de ellas".

Poca vivienda rehabilitada

Desde la comarca se propone que, para hacer atractiva la recuperación de la población, se establezca un parque de vivienda pública, una bajada de precios de alquileres y el acceso a la primera vivienda a un precio simbólico, pagando una pequeña entrada a cambio de hacerse cargo de su mantenimiento.

Los pueblos suelen disponer de vivienda tradicional de dos o tres plantas vacía, pero la cuestión principal es la rehabilitación de las mismas y, por tanto, se requiere de una “fuerte” intervención institucional para acondicionar y hacer habitables esas viviendas.

Iniciativas de éxito

La asociación IETEC, que realiza acciones formativas, socioeconómicas, de investigación y culturales en colaboración con otras entidades del territorio como el Grupo de Acción Local Caroig-Xúquer-Serra Grossa, celebró el pasado 24 de octubre unas jornadas sobre 'Ruralidades. Perspectivas de desarrollo rural y concreciones socioeconómicas' en Quesa con la participación de más de 50 personas para hablar sobre las desigualdades y las potencialidades del territorio, revertir la despoblación y promover iniciativas socioeconómicas de éxito.

En esta jornada se dieron a conocer iniciativas de la comarca y de otras zonas como Natural de Montaña, de Anna, de verduras valencianas de proximidad; la cooperativa Siempreviva, de Bolbaite, dedicada a plantas aromáticas; Campo Enguera, de aceite de oliva y otros productos; la iniciativa del Ayuntamiento de Bicorp sobre actividades socioculturales como eje dinamizador; el Mercado del Riurau, de Jesús Pobre, de productos de proximidad, artesanía, que ha recuperado semillas originales; el celler del Roure y la bodega de Rafa Cambra, de Fontanars dels Alforins; y la asociación Bioterreta-custodia agraria, un proyecto multidisciplinar de custodia del territorio.

Una forma de recuperar el territorio es la que plantea Bioterreta desde 2019, un proyecto de custodia agraria basado en reconvertir una finca de olivos en producción ecológica desde una visión circular de lucha contra el abandono generacional de la tierra y de gestión social.

Una finca de 12.000 metros cuadrados en Enguera se ha reconvertido en ecológica certificada a partir de la observación fenológica, para relacionar el clima y el ciclo de vida; la observación digital-satelital que aporta información sobre humedad, madurez, intrusismo, salinidad; y la sensórica.

Este manejo de la tierra se complementa con robots agroforestales adaptados al minifundio traídos de la Toscana italiana, y con una comercialización de la producción en circuito cerrado pero que se va a abrir al público a través de una plataforma llamada Nostrum.

La perspectiva circular  de Bioterreta contempla además crear una red de obradores compartidos como un centro de innovación para nuevos productos y de distribución agroalimentaria para aprovechar el producto desechado por las cooperativas.

Bioterreta Custodia Agraria ha entrado a formar parte del Club de Buenas Prácticas del EU European CAP Network por su modelo innovador e integrado de agricultura, biodiversidad, alimentación, ciencia ciudadana y tecnología aplicada; y fue finalista en los Premios de Inspiración Agraria y Rural ARIA 2023, y en el concurso de proyectos con impacto social y ambiental de Vivaces 2023-alianza de empresas que trabajan para visibilizar el potencial del medio rural-. En 2022 ganó el Premio CONAMA (Congreso Nacional de Medio Ambiente) en la categoría de municipios de entre 5.000 y 30.000 habitantes

Finalmente, desde l’Associació Institut d’Estudis Territorials el Caroig (IETEC) señalan: "Hemos de hacer nuestro el inicio a la transición ecológica y social"

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